El 17 de diciembre pasado, durante la celebración de la posada del personal de la Fiscalía de Puerto Vallarta, se registró un altercado protagonizado por Santiago Ramírez, subdirector y encargado de la delegación de la Fiscalía en ese municipio. Un video difundido en redes sociales muestra una acalorada discusión entre Ramírez y una mujer, culminando con una cachetada propinada por el funcionario.
Pero la historia no termina ahí. En el mismo video, se observa a otro individuo, identificado en redes sociales como el Ministerio Público José Carlos Peña Chavarín, profundamente dormido en la cajuela de un vehículo oficial de la Fiscalía. El estado de ebriedad del Ministerio Público se ha convertido en otro punto de controversia dentro de este escándalo.
Ante la creciente indignación pública, el gobernador de Jalisco, Pablo Lemus Navarro, ha emitido una contundente declaración: “Pues que se vaya despidiendo de la chamba ese señor de una vez, pero lo que me están narrando es terrible, ese señor se va. Nosotros no podemos soportar a nadie, olvídense de la posada, miren que golpeó a una mujer eso no lo puedo soportar. Se va. Ahorita hablo con el fiscal, si los hechos son como me narraron ustedes ahorita en este momento se va en este momento.”
La firme postura del gobernador deja claro que no habrá tolerancia para este tipo de comportamientos dentro de la administración pública jalisciense. Las acciones que se tomen contra Ramírez, así como las investigaciones sobre la presunta conducta inapropiada de Peña Chavarín, se encuentran en desarrollo. La Fiscalía del Estado de Jalisco, hasta el momento, no ha emitido un comunicado oficial al respecto.
Este caso pone de manifiesto la necesidad de mayor transparencia y rendición de cuentas por parte de las instituciones públicas, especialmente en lo que respecta al comportamiento de sus funcionarios.