Polémica por cambio de nombres de calles en Estado de México

La alcaldesa de Tultitlán, Elena García Martínez, ha impulsado un ambicioso proyecto de renombramiento de calles y colonias. La más sonada: el cambio de Paraje Firmeza 1, 2 y 3 a Cuarta Transformación (4T). Esta decisión, sin embargo, no ha estado exenta de polémica.
La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, ofreció su perspectiva durante la “Mañanera del Pueblo”. Si bien reconoció la legitimidad de la decisión municipal, “Yo creo que es mejor poner nombre de…. recuperar la memoria histórica de México, pero sí, así lo quisieron poner, pues también es decisión de ellos,” señaló, recordando sus propias iniciativas de renombramiento durante su gestión.
Sheinbaum contrastó la iniciativa de Tultitlán con sus propias acciones, como el cambio del nombre del Puente de Alvarado a México-Tenochtitlán o la modificación de la denominación de la estación del Metro Zócalo a Zócalo-Tenochtitlán. Su enfoque, a diferencia del de Tultitlán, se centró en la historia prehispánica de México.
El proyecto de Tultitlán va más allá de un simple cambio de nombre. Se trata de una estrategia de rebranding territorial que refleja una narrativa política específica. Las nuevas denominaciones de calles, muchas de ellas en las colonias Madres Trabajadoras y Sembrando Vida (antes Paraje y Firmeza), hacen referencia directa a programas sociales y eslóganes asociados con la administración de Andrés Manuel López Obrador.
Ejemplos de estos nuevos nombres son: Bienestar, Becas Benito Juárez, La Escuela es Nuestra, Mexicana de Aviación, Jóvenes Construyendo el Futuro, Me Canso Ganso, Pensión para Adulto Mayor, Canasta Básica y Tren Maya. Incluso, se reporta la existencia de una calle llamada "Acusalo con tu mamá".
La resistencia vecinal a estos cambios es palpable. Aunque no se ha dado a conocer una postura oficial por parte de las autoridades locales ante las protestas vecinales, la situación demuestra la complejidad de la relación entre el espacio público, la memoria colectiva y la narrativa política.
La discusión sobre el significado y la legitimidad del uso del espacio público para la transmisión de mensajes políticos, permanece abierta y revela diferentes perspectivas sobre el pasado y el presente de México.