Detrás de las fachadas impecables y las rutinas cotidianas, se esconde la realidad que enfrenta una ciudad en constante transformación. El incidente tuvo lugar en la calle Lucila Godoy, entre Palestina y Virginia Fábregas. Dos hombres armados, a bordo de una camioneta gris, irrumpieron en una residencia alrededor del mediodía. Según testigos, "amenazaron a por lo menos tres integrantes de la familia" para robarles sus pertenencias: dinero en efectivo, celulares, joyas y otros objetos de valor.
Durante el asalto, se produjo un forcejeo. El resultado: el padre de familia resultó herido de bala en el mentón. Mientras el hombre era trasladado al hospital, los delincuentes huían. Sin embargo, su precipitada escapada dejó un rastro: a una cuadra y media de la escena del crimen, en Lucila Godoy y Pirineos, las autoridades encontraron evidencia clave:
- Una gorra
- Una bolsa cangurera con dinero
- Un par de tenis
- Un pasamontañas
Horas más tarde, un incidente separado, pero con un elemento en común —un herido de arma de fuego— se reportó al sur de Monterrey. En un supermercado en la avenida Garza Sada y José Alvarado, en la colonia Florida, un hombre llegó afirmando haberse herido la mano accidentalmente con una escopeta. Después de pedir ayuda, huyó del lugar. Las autoridades implementaron un operativo de búsqueda, pero el hombre no fue localizado. La conexión entre ambos eventos aún está bajo investigación.
La colonia Roma, al igual que otras zonas de Monterrey, se enfrenta a la dura realidad del incremento de la delincuencia. Este suceso subraya la necesidad de reforzar las medidas de seguridad y promover la colaboración entre la ciudadanía y las autoridades para combatir la inseguridad en la ciudad.