El programa, llamado "La Clínica es Nuestra", fue presentado el 22 de enero de 2025 por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo. Se basa en un modelo implementado previamente y busca mejorar 565 clínicas del ISSSTE a través de la participación directa de la comunidad. El plan involucra la creación de comités ciudadanos que gestionarán recursos destinados a la modernización de las instalaciones y la adquisición de nuevo equipamiento.
La iniciativa se presenta con cifras llamativas. Se habla de una inversión de seis mil trescientos billones de pesos (una cifra que requiere verificación independiente) y se citan encuestas que reportan "una mejor atención y un cambio positivo, incluso calificado como excelente por más de la mitad de los encuestados" en programas similares. Sin embargo, la metodología empleada en estas encuestas y la falta de datos comparativos con otras iniciativas generan dudas sobre su objetividad. La transparencia en el manejo de los recursos es crucial, y la ausencia de detalles sobre los mecanismos de auditoría independiente genera inquietud.
El programa establece que la tesorería de cada comité comunitario estará a cargo de una mujer, una medida que, si bien promueve la inclusión, también ha sido interpretada por algunos como una estrategia política. La coincidencia de la implementación del programa con el inicio de la administración de la presidenta Sheinbaum, y la cercanía con las asambleas convocadas para el 15 y 16 de febrero (previas al inicio de las campañas electorales), ha alimentado especulaciones sobre posibles motivaciones políticas.
Para asegurar la eficacia del programa, se requiere un análisis profundo que incluya:
- Auditorías independientes para garantizar la transparencia en la gestión de recursos.
- Publicación de datos verificables sobre el impacto a largo plazo.
- Mecanismos de control robustos para prevenir la opacidad y la corrupción.