Joven pareja hallada sin vida en Apodaca, Nuevo León

La noticia involucra a una joven pareja, encontrada sin vida en una vivienda de la colonia Hacienda el Mezquital, en Apodaca, Nuevo León. Roberto Silva, de 44 años, y Johana González Guerrero, según identificaron algunos usuarios, fueron hallados sin vida la noche del jueves 13 de marzo. Las autoridades, al llegar a la casa ubicada en la calle Hacienda Santiago, encontraron los cuerpos sin evidentes signos de violencia, abriendo una investigación que apunta, preliminarmente, a una posible intoxicación.
“El día de ayer 13 de marzo recibí la noticia más impactante de mi vida. Mi hijo amado, mi primogénito Roberto Silva falleció”, escribió Patricia Silva, madre de Roberto, en una emotiva publicación en redes sociales. Su mensaje, cargado de dolor, refleja la devastación que embarga a la familia. Patricia dedicó unas conmovedoras palabras a su hijo, expresando el vacío irreparable que deja su partida: “Nos dejaste con el corazón destrozado… algún día nos volveremos a reencontrar por una eternidad, te amaremos por siempre, mi tesoro”.
La incertidumbre rodea las causas de la muerte. Si bien la hipótesis inicial se centra en una intoxicación, las autoridades continúan las investigaciones para determinar con certeza lo ocurrido. Se sabe extraoficialmente que la pareja se encontraba de visita en la casa, donde aparentemente habían celebrado una fiesta con amigos la noche anterior.
Las reacciones en redes sociales son un mar de condolencias. Amigos de Roberto y Johana compartieron recuerdos y testimonios que pintan un retrato de dos personas queridas y apreciadas. Un amigo de Roberto describe el impacto de la pérdida: “Mi más sentido pésame… aún no lo puedo creer que mi gran amigo ya no esté con nosotros… Descansa en paz amigo Roberto Silva”. Mientras que una amiga cercana a Johana la recuerda así: “Johana González Guerrero, descansa en paz. No solo era mi sobrina era mi amiga, confidente, una mujer luchana, trabajadora y con un corazón enorme”.
Los detalles aún son escasos, y la investigación continúa su curso. La espera por respuestas y la profunda tristeza de las familias involucradas marcan un final abierto en esta historia, dejando una profunda huella en la comunidad de Apodaca.