Desierto frena su sueño

Joven guatemalteca resistió lo más que pudo, pero sus pies no daban más

Desierto frena su sueño
...

Tu opinión es muy valiosa para mí y me ayuda a crear mejor contenido para ti.
Por favor, indícame qué fue lo que no te gustó.

¡Gracias por calificar mi nota! Nos ayuda mucho para crear más contenido como este.
Una joven mujer guatemalteca terminó deportada y con los pies hechos pedazos después de sobrevivir a una difícil travesía en su recorrido por México y el desierto en su intento por llegar a Estados Unidos.

El sueño de Flor Ivana Damacar, de 22 años, era ir a los Estados Unidos a trabajar para ganar mucho dinero y poder sacar adelante a su familia, la cual reside en su natal Guatemala y se conforma por sus padres y dos hermanos menores.

Este sueño le fue frustado a Flor Ivana luego de atravesar México y llegar a un punto en el desierto donde sus pies ya no pudieron más, debido a las ampollas que se le formaron, lo que le impidió seguir su camino, hasta que fue rescatada por personal de la Patrulla Fronteriza.

La mujer contó que la mayor parte del recorrido por México lo hizo en camiones, algunas veces iba cómoda, pero en otras ocasiones se tenían que esconder en espacios muy reducidos, donde junto con otras personas iba apretada y encerrada para no ser descubierta.

Después de ocho días de viaje, Flor Ivana y otros migrantes llegaron a la ciudad de Altar, Sonora, donde permanecieron 15 días hospedados, y -a decir de la joven-, fueron bien tratados, comían y dormían bien.

Relató que después de esos 15 días en Altar, se prepararon para internarse en el desierto, donde comenzó el fin de su sueño de poder llegar a Estados Unidos para trabajar y sacar adelante a su familia.
La joven guatemalteca narró que se internaron en el desierto a pie y caminaron por días, cuatro o cinco,  hasta que ya no aguantó y cayó desmayada.

Flor Ivana recordó que después de esto todavía continuó con su recorrido de noche y pudo aguantar otra noche más, pero, a las tres de la mañana, ya no pudo continuar y se quedó dormida en un arbusto y despertó hasta las 11:00 horas del día siguiente.

Cuando despertó se encontraba sola, el grupo con el que viajaba ya se había ido. Como pudo se levantó y trató de caminar en busca de agua y se encontró con otro grupo de personas que pasaban y la apoyaron con agua y compañía.

Con la ayuda de este grupo pudo recuperarse poco y continuó con ellos, pero ya cuando estaban a punto de llegar a la ciudad de Tucson, Arizona, fueron sorprendidos por la Patrulla Fronteriza y los detuvieron.

Caminé un día y dos noches más, llegando, ya casi, fue cuando nos agarraron, fue donde yo ya no pude más y nos agarraron, después nos llevaron a Tucson y fue donde me curaron los pies”, expresó Flor Ivana.

Después que fue atendida médicamente, la mujer guatemalteca fue deportada a México por la frontera de Nogales, Sonora y fue llevada al albergue para migrantes San Juan Bosco, donde permanecerá hasta que se recupere y pueda regresarse a su país natal.

Flor Ivana declaró que ya no piensa intentar cruzarse a Estados Unidos, me da miedo volver a pasar esa vida de nuevo, como mi meta era ir allá a trabajar y sacar adelante a mi familia, pero ya no se pudo, en cuanto me recupere me voy a ir con mi familia”, finalizó.

Comparte esta noticia