Nogales como frontera es un punto de confluencia de muchas personas de distintos puntos de origen y cada una tiene su propia historia, como el joven malabarista de fuego Kevin Balderrama, que cuenta un poco de su aventura y sueños.
Es originario de Los Mochis, Sinaloa, que recién llegó a Nogales y durante los últimos 3 años se gana la vida como malabarista de cadenas con fuego en calles y cruceros como entretenimiento para automovilistas, así como el uso de su bicicleta como herramienta de movilidad.
Esto lo aprendí en un festival de electrónica, por allá donde vivo, vivo en Los Mochis, vengo de Los Mochis, y, pues, se dio como gusto nada más por el cómo se ve, pues es entretenido, tanto como para adultos como para niños, dijo.Expuso que tomó esta actividad como una motivación incluso hasta para la resolución de problemas, con la oportunidad tomarlo como un trabajo para sustento, para estudios y para viajar, toda vez que le brinda la oportunidad de aventurarse a conocer otras ciudades como alma libre, pero con sueños de establecerse y también poder concluir sus estudios académicos profesionales.
He estado por diversos estados de la república también, en esta ocasión tocó aquí en Nogales, que aquí vive mi papá y ahora, pues, es una de mis metas, venir a estudiar y terminar de formarme académicamente, primero que nada, aquí, indicó.
El joven Kevin Balderrama dijo que esta disciplina se le conoce como meteoros, malambos o malabar, que ciertamente tiene un grado de dificultad importante que requiere de bastante práctica para su dominio y finalmente poder armar un espectáculo para la gente, que es apreciado en todas las ciudades donde ha tenido la oportunidad de visitar, al precisar que en Monterrey se quedó su hermano, que también le da al movimiento psicodélico, como lo llamó.
En ocasiones que sí es generosa la gente, pero como todos a veces estamos gastados, lo que sale es al menos para comer y para lo que se necesita, refirió sobre el respaldo de la ciudadanía a retribuir su espectáculo.Se le podría localizar principalmente en los bulevares porque es donde más se llena de autos y es más visible todo el espectáculo, esta vez localizado en bulevar Colosio y avenida Kennedy; también en redes sociales como Kevin Balderrama en Facebook o Kevin.balderrama en Instagram.
Explicó que para estas actividades de malabares con fuego utiliza parafina refinada, pero ante la dificultad para conseguirla de manera frecuente, también utiliza gasolina, con la premisa que posiblemente sí respira un poco de combustible cuando se quema, pero es poco porque regularmente está al aire libre, sin afectaciones de salud hasta este momento.