José Antonio y su hijo perdieron su cita, pero no la esperanza

Con la suspensión de los trámites legales mediante la aplicación CBP One para ingreso legal a los Estados Unidos de Norteamérica a través del asilo humanitario como derecho universal, miles de migrantes vieron frustrada la posibilidad de adelantar este mecanismo.

Por lo que se mantienen a la expectativa de la estrategia de atención que habrá de imponer el nuevo presidente Donald Trump y su gobierno, como es la historia de José Antonio y su hijo, originarios de Venezuela.

José Antonio es un hombre de origen venezolano, que recién llegó a Nogales acompañado de su hijo de 21 años con una condición de salud, precisamente por la que tenía una cita con autoridades migratorias de Estados Unidos a través del mecanismo CBP One para el día 20 de enero.

Esto como parte de su proceso de asilo, sin embargo, le tocó ser parte de la historia en este contexto de transición gubernamental que se vive en Estados Unidos con la llegada de nueva cuenta de Donald Trump a la presidencia y su trámite fue suspendido.

Trastornos por cancelación de citas

Pues el trastorno de nosotros es sobre lo de la cita, porque ellos a nosotros nos asignaron una cita, incluso nos la asignaron para el 20 de enero, y ya pues teníamos el lapso de que nos dan 20 días para llegar al destino donde está la cita, dijo.

Da la casualidad de que, a nosotros, cuando nos faltaban ya dos días, ya estábamos abordando el avión para acercarnos hacia el puerto, nos la trasladaron para el 9 de febrero, agregó.

Manifestó que, como parte del trastorno en ese cambio de gobierno y las nuevas disposiciones migratorias, decidió seguir su ruta hacia la frontera, ya que ante a premura de la notificación electrónica le fue imposible cancelar o posponer sus vuelos de avión, además que no le reembolsarían el dinero ni nada, por lo que decidieron avanzar y presentarse, pero la razón que les dieron es que no, que ese mecanismo ya había sido cerrado.

Nosotros lo que queremos es como que nos den una orientación, qué pasos a seguir, qué procede, o si tenemos alguna oportunidad o algo, es lo que necesitamos nosotros, expuso.

Como en familia en Iniciativa Kino para la Frontera

Fueron canalizados a Iniciativa Kino para la Frontera, donde encontraron el acompañamiento y sobre todo esa sintonía de esperanza que, al final de cuentas les brinda una fortaleza humanitaria para esperar las nuevas disposiciones de atención y seguimiento a migrantes que buscan un ingreso por la vía legal hacia los Estados Unidos.

Mira, aquí es como una familia para nosotros, porque así lo siento yo, desde que llegué nos han atendido maravillosamente, no tenemos quejas, porque para qué, sería algo mentir, decir que nos están tratando mal, esto es algo maravilloso lo que están haciendo, expresó.

De verdad, nosotros como emigrantes sí pasamos bastantes cosas fuertes en el camino y aquí hemos encontrado como una especie de familia, porque a eso se le puede decir a la persona que le tiende la mano a uno, agregó. 

Aspira tratamiento para epilepsia de su hijo

José Antonio manifestó que su motivación para salir de Venezuela es la posibilidad de encontrar mejor condición de vida para su hijo, así como tratamiento médico que les permita mejores rumbos y nuevas esperanzas, con la premisa que su esposa se quedó en su tierra, principalmente porque sabía de los peligros que enfrentaría para alcanzar a cruzar las fronteras y peligros, aunque la realidad que vivieron superó cualquier expectativa.

Mi hijo tiene 21 años y nosotros en Venezuela no la estamos pasando muy bien, para nadie es un secreto a nivel mundial, eso ya se sabe, que Venezuela tiene un régimen y no tenemos ayuda por ningún lado ahí en Venezuela. Mi hijo pues, él tuvo un problema de epilepsia y más que todo eso fue lo que me movió a salir del país, a buscarle nuevas esperanzas, aseguró.

Con la seguridad que la espera de los nuevos procedimientos que dictaminen las autoridades estadounidenses en esta etapa de transición política será satisfactoria próximamente, reflexionó en un mensaje a otros compañeros migrantes que de alguna manera también están buscando este flujo legal, sobre todo hacia los Estados Unidos.

Fe y esperanza, todo estará bien

A muchos de ellos les he dicho que tengamos fe en Dios, que tengamos fortaleza, que seamos perseverantes y que no hagamos nada malo para no perjudicarnos tanto a nosotros como venezolanos, como al país donde estemos, señaló.

Que seamos personas humildes, que sepamos tratar a las personas, que, si hay alguna controversia o qué sé yo, más bien tratar de alejarse uno, buscar la solución, es hablar, dialogar, no discutir, no ir a pasos malos, hay que buscarles una esperanza de que de verdad sea pura, sin ningún rechazo o ‘X’ cosa, dijo. 

Sobre qué sigue para él y su hijo, enfatizó que tiene mucha fe que se va a resolver la situación, mientras tanto, quiere emprenderse a buscar un trabajo, alguna parte donde puedan alquilar para buscar soluciones, porque de verdad quedarse de brazos cruzados no es ni será su forma, por lo que si alguien puede colaborar las ayudas son bienvenidas.

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