El Secretario de Estado, Adrian Fontes, destacó un alarmante aumento de 97,928 votantes sin prueba de ciudadanía en solo una semana, enfatizando que estos ciudadanos se encuentran registrados pero no han presentado la documentación requerida por una ley estatal del 2004.
Sin embargo, un fallo reciente de la Corte Suprema de Arizona ha permitido que estos votantes participen en las próximas elecciones para todos los cargos y propuestas, contrarrestando las preocupaciones de que solo deberían poder votar en las elecciones federales debido al problema de la prueba de ciudadanía.
La ley en cuestión, aprobada por iniciativa popular en 2004, exige que los votantes presenten prueba documentada de ciudadanía para registrarse en Arizona. Las formas aceptables de prueba incluyen certificados de nacimiento, pasaportes y documentos tribales específicos.
Un punto clave es que la ley tiene una disposición que permite suponer que quienes obtuvieron una licencia de conducir después de 1996 son ciudadanos, ya que una ley diferente que exige prueba de presencia legal para obtener una licencia se promulgó ese mismo año. Esto ha generado complicaciones para quienes se registraron después de 2004 o actualizaron sus registros después de mudarse, especialmente aquellos con licencias anteriores a 1996.
La raíz del problema: las discrepancias en los registros de la División de Vehículos Motorizados (MVD). Al verificar estos registros, los funcionarios del condado pueden identificar erróneamente a las personas con licencias más antiguas como si tuvieran prueba de ciudadanía. Esto a menudo se debe a actualizaciones, como cambios de dirección o solicitudes de licencias duplicadas, que pueden listar la fecha de la actualización en lugar de la fecha original de la licencia, lo que lleva a suposiciones erróneas sobre el estado de ciudadanía.
Un aspecto significativo de la situación es la composición demográfica de los votantes afectados. Se inclina fuertemente hacia personas mayores, particularmente aquellas de 45 años o más, con una porción significativa identificándose como republicanos. Alrededor del 36 por ciento de quienes carecen de prueba de ciudadanía son republicanos, mientras que los demócratas representan aproximadamente el 28 por ciento. Estos datos plantean preguntas sobre las implicaciones para la representación de los votantes y el compromiso político en futuras elecciones.
Para aquellos preocupados por su estatus de registro de votantes, existen opciones disponibles para verificar su elegibilidad. Las personas que poseen una Real ID, emitida desde 2005 y que requiere prueba de ciudadanía para su obtención, pueden estar más seguras de su estatus.
La Oficina del Secretario de Estado de Arizona ha creado un sitio web donde los residentes pueden verificar su estado de registro de votantes para confirmar si se ven afectados por el problema de la prueba de ciudadanía.
Mientras el estado se prepara para la próxima elección general, los funcionarios electorales se centran en asegurar un proceso de votación fluido. Tras la elección, el enfoque se trasladará a resolver estas discrepancias en la prueba de ciudadanía, asegurando que los derechos de todos los votantes sean protegidos en futuros procesos electorales.