La noticia llegó como rápidamente: Llama Group, la empresa belga dueña de Winamp, liberó el código fuente del reproductor. Era una oportunidad única para que desarrolladores de todo el mundo pudieran revivir la magia de Winamp, actualizarlo y adaptarlo a la era moderna.
Sin embargo, el código fuente no era tan libre como se esperaba. La licencia, denominada Winamp Collaborative License (WCL) Version 1.0.1, restringía la distribución de versiones modificadas del software, tanto en código fuente como en binario. En otras palabras, solo el equipo de Winamp podía distribuir versiones modificadas.
A pesar de estas restricciones, o quizás debido a ellas, el código fuente de Winamp ha sido forqueado más de 2,600 veces. Los desarrolladores, al examinar el código, se encontraron con algunas anomalías bastante peculiares.
En el código, se encontraron secretos ocultos, como un mensaje encriptado que decía "Llama Group Rules!". También se encontraron trazas de código antiguo, que parecían provenir de una época en la que Winamp era un programa mucho más sencillo.
La liberación del código fuente de Winamp ha generado un gran debate entre los desarrolladores. Algunos argumentan que la licencia de Llama Group es demasiado restrictiva, mientras que otros creen que es necesaria para proteger la integridad del software.
Lo cierto es que Winamp, con su código fuente al descubierto, se ha convertido en un misterio que solo los desarrolladores más intrépidos pueden resolver.