Esperan casi un siglo

RIO DE JANEIRO.
Argentina es fuerte favorito para ganar el rugby que vuelve a JO.
Al rugby le tomó 92 años volver a unos Juegos Olímpicos. A pesar de eso, para el argentino Agustín Pichot, no hay mejor momento que 2016.
Pichot, un miembro clave del equipo que logró en 2009 que el deporte fuera incluido en la justa y quien es vicepresidente de la federación de rugby, apenas podía contener la emoción el viernes, un día antes del inicio de las competencias.
En términos de logros, coloca el regreso del rugby al lado de la primera Copa del Mundo realizada en 1987 y cuando el deporte se profesionalizó en 1995. Y cree que al deporte le esperan buenos momentos, especialmente fuera de su mercado anglosajón.
“Estar aquí en un país latino, en Sudamérica (donde el deporte no era muy popular) es un gran logro”, dijo Pichot. “El reto es grande, pero el cambio se viene”.
“Estamos hablando en inglés aquí (sala de conferencias), pero muchas naciones no hablan ese idioma y lo que veremos ahora es que muchos países no anglosajones comiencen a ver al rugby como una opción diferente. Lo he visto en Colombia, México y muchos países. Tenemos la oportunidad de crecer mucho”.
El crecimiento ha sido masivo desde que el COI votó 81-8 para aprobar al deporte para los Juegos del 2016 y 2020. En siete años desde entonces, la participación global se ha duplicado a 7,73 millones y el porcentaje de jugadoras ha crecido un 10 por ciento a más del 30.
El presidente de la federación, Bill Beaumont, espera un interés mayor luego de la cobertura de televisión de los Juegos.
“Espero y estoy confiado que los equipos van a estar saturados al inicio de la próxima temporada en Europa, con más niñas queriendo jugar rugby.