Renata Zarazúa inició la semana con la alegría de estar dentro de las mejores 100 jugadoras del mundo. Aunque la mexicana está feliz por cumplir una meta personal, todavía le falta cumplir su sueño más grande: ganar un torneo en su propio país.
Zarazúa dio el primer paso hacia esa meta el lunes al imponerse 6-1, 3-6, 6-1 sobre la ucraniana Anhelina Kalinina y avanzó a la segunda ronda del WTA 500 de Guadalajara.
El triunfo de la jugadora de 26 años se dio el mismo día en el que alcanzó el puesto 85 en la clasificación del mundo.
Se trata de la mejor clasificación para una raqueta mexicana desde que Angélica Gavaldón alcanzó el puesto 34 en enero de 1996.
“Significa muchísimo, era una de mis metas el estar ‘Top-100’ y ya lo logré, pero no me quiero quedar satisfecha”, dijo la mexicana en una rueda de prensa.
En esta temporada, Zarazúa logró participar en los cuadros principales de los cuatro Grand Slams de la WTA con lo que emuló lo hecho por Gavaldón en la temporada de 1995.
“En el tenis no sabes cuantos años vas a jugar y este año dije ‘voy a dejar todo y que me vaya bien o mal’” dijo Zarazúa. “Me puse en la mejor forma física, pero también la mental porque no todo es jugar al tenis, hay que seguir mejorando en otras cosas”.
Uno de esos aspectos en los que Zarazúa vio área de oportunidad para mejorar fue el dominar la presión que la carcomía, especialmente jugando en casa, donde las expectativas de sus seguidores mexicanos la hacían cometer errores en el pasado.
“Hay que aprender a manejar los nervios y la presión y llevarlos de tu lado, es bueno enfrentarlos y no huir de ellos”, agregó. “Hace años no quería sentir miedo ni presión y me dijeron ‘vete del tenis o retírate porque eso lo vas a vivir año con año’, entonces ahora voy a tratar que la presión sea mi amiguita”.
En la siguiente ronda, Zarazúa enfrentará a la ganadora del partido entre la estadounidense Caroline Dolehide y la italiana Martina Trevisan.
“En un torneo la primera ronda siempre es la más difícil porque jugar en el estadio nunca se compara a los entrenamientos, hasta que no juegas no sientes lo que es el torneo”, añadió. “Mañana juego dobles y voy a tratar de relajarme, por más que se bajaron algunas tenistas, el torneo es duro”.
Previo al arranque del torneo mexicano, la china Qinwen Zheng, la griega Maria Sakkari y la estadounidense Emma Navarro se retiraron abriéndole un poco el camino a Zarazúa para cumplir su meta de vida en el tenis.
“Siempre he dicho que no me quiero retirar hasta ganar un torneo en México, es una de mis metas más grandes. Si me preguntan sobre el ranking les puedo decir que para mí sería mejor lo mejor ganar en México”, agregó Zarazúa. “No sé sí será esta semana, pero espero que algún día se cumpla”.