Los Lions, liderados por su récord de 11-1, buscan mantener su posición como líderes de la Conferencia Nacional y asegurar un lugar en los playoffs con su 11ma victoria consecutiva, lo que establecería un récord para la franquicia. Sin embargo, Green Bay (9-3) también tiene mucho que ganar, ya que puede acercarse a un partido de los Lions si divide la serie de la temporada.
La capacidad de Green Bay para frenar el juego terrestre de Detroit podría ser crucial en este enfrentamiento. Jahmyr Gibbs y David Montgomery, los primeros compañeros de equipo en la historia de la NFL en correr para al menos 10 touchdowns en temporadas consecutivas, han combinado un promedio de más de 140 yardas terrestres por juego. Los Packers han demostrado su capacidad para limitar el juego terrestre de sus oponentes, como lo hicieron con Christian McCaffrey, de San Francisco, a quien limitaron a 31 yardas en 11 intentos.
La localía no ha sido una ventaja en la serie últimamente entre los rivales divisionales. El equipo visitante ha ganado cuatro juegos consecutivos, remontándose a cuando Detroit cerró la temporada regular de 2022 y la carrera de Aaron Rodgers con los Packers con una victoria 20-16 en Lambeau Field. Green Bay ha ganado cinco juegos consecutivos como visitante en el Norte de la NFC, incluido el año pasado en Detroit en Acción de Gracias.
En su último enfrentamiento, "La capacidad de Green Bay para frenar el juego terrestre de Detroit podría ser crucial", dijo un experto en la NFL. Montgomery corrió 17 veces para 73 yardas y Gibbs tuvo 65 yardas por tierra y un touchdown en 11 acarreos el mes pasado en Green Bay. La pregunta es, ¿podrán los Packers repetir su éxito y frenar el juego terrestre de los Lions?
La respuesta la tendremos el jueves por la noche en la Ciudad del Motor, cuando Detroit y Green Bay se enfrenten en un partido que promete ser emocionante y lleno de acción.