El encuentro entre los Pacers de Indiana y los Suns de Phoenix fue, sin duda, uno de los más atractivos. Los Pacers se impusieron con un contundente 126-108, demostrando un juego colectivo excepcional y una defensa férrea que dejó sin opciones a las estrellas de Phoenix.
Tyrese Haliburton fue el líder indiscutible de Indiana, con una magnífica actuación que se tradujo en 27 puntos y 8 asistencias. Su precisión y visión de juego fueron claves para la victoria. Cabe destacar que, por segundo partido consecutivo, "no cometió ninguna pérdida de balón," una muestra de su madurez y control en la cancha. Myles Turner también aportó su granito de arena con 20 puntos, 6 rebotes y 3 bloqueos, demostrando su dominio en la pintura.
Por el lado de los Suns, Kevin Durant lideró el ataque con 25 puntos, 7 rebotes y 7 asistencias, demostrando una vez más su veteranía y calidad. Devin Booker, quien en su anterior visita a este mismo estadio había roto récords con 62 puntos, se quedó esta vez con 20 puntos, 9 rebotes y 9 asistencias. A pesar de sus esfuerzos, la defensa de Indiana resultó insuperable.
La clave del triunfo de Indiana estuvo en un tercer cuarto arrollador. Con 40 puntos anotados, su tercer mejor registro de la temporada, los Pacers rompieron el empate de 56 al medio tiempo y tomaron el control absoluto del partido. De ahí en adelante, nunca miraron hacia atrás.
Las estadísticas hablan por sí solas: 35 asistencias en 46 canastas y solo 6 pérdidas de balón. Un despliegue de juego colectivo y precisión pocas veces visto. Además, dominaron el rebote con un contundente 47-37.
Con esta victoria, Indiana iguala su récord general en 18-18, demostrando una notable recuperación en las últimas semanas. Los Pacers barrieron la serie de temporada contra Phoenix, una muestra más de su superioridad en este enfrentamiento. Ambos equipos ya piensan en sus próximos desafíos: Phoenix viajará a Filadelfia y Indiana a Brooklyn, ambos el lunes.