Se respiraba una atmósfera cargada de expectativa, con aficionados de diversas nacionalidades unidos por la pasión por el deporte rey.
Pero la atención se centró rápidamente en el encuentro entre los Cardenales de Lara, campeones venezolanos, y los Indios de Mayagüez de Puerto Rico. Los Indios, con una destacada actuación inicial de Eddie Rosario y Mario Feliciano, lograron una ventaja temprana de 2-0. Anthony García, con un impresionante cuadrangular de tres carreras, amplió la diferencia a 5-1, dejando a los Cardenales en una posición complicada.
Sin embargo, la respuesta venezolana no se hizo esperar. Un doble remolcador de Ildemaro Vargas en el tercer episodio inyectó esperanza al equipo. Luego, en una demostración de resiliencia, los Cardenales fueron descontando la ventaja poco a poco. Anotaciones en el cuarto y quinto inning, gracias a Alexi Amarista, y un jonrón solitario de Danry Vázquez en el sexto, empataron el juego 5-5, electrizando al público.
El séptimo episodio resultó crucial. Un doble productor de dos carreras de Hernán Pérez puso a los Cardenales al frente. El octavo inning selló la victoria con un sencillo remolcador de dos carreras de Rangel Ravelo, culminando en un marcador final de 10-5 a favor de Venezuela.
“Vamos a pasar la página, la Serie del Caribe se juega día a día,” comentó el manager de los Indios de Mayagüez, Wilfredo Cordero, mostrando una actitud positiva a pesar de la derrota. Por su parte, Henry Blanco, manager de los Cardenales, destacó la agresividad de su equipo: “Hoy conseguimos batear, fuimos muy agresivos en todos los turnos y creo que esa fue la clave.”
Con esta victoria, los Cardenales de Lara mantienen vivas sus aspiraciones de revalidar el título para Venezuela. Los Indios de Mayagüez, con marca de 1-2, deberán enfrentarse a los Leones del Escogido en un partido decisivo para definir su pase a la siguiente ronda. El encuentro entre Venezuela y Japón promete ser igualmente emocionante.