Tribunal europeo sacude al arbitraje deportivo: decisiones del CAS ahora impugnables

Hasta ahora, atletas, clubes y federaciones estaban obligados a aceptar sus veredictos sin posibilidad de apelación fuera del territorio suizo.
"Los laudos emitidos por el CAS deben ser susceptibles de una revisión judicial efectiva", sentenció el TJUE en un comunicado que recalca la necesidad de alinear estos fallos con las normas fundamentales del derecho europeo. La resolución no solo abre la puerta a impugnaciones, sino que cuestiona la arquitectura legal que por décadas ha protegido a organismos como la FIFA y el COI bajo el paraguas suizo.
Detrás del histórico fallo está una batalla de diez años librada por el RFC Seraing, club belga de segunda división, y el fondo maltés Doyen Sports. Ambos desafiaron las normas de la FIFA que prohíben la propiedad externa de derechos de jugadores, argumentando que violaban la libre competencia dentro de la UE. Aunque el TJUE no se pronunció directamente sobre este polémico modelo de negocio, su decisión desnuda las fisuras del sistema actual.
Mientras el director del CAS, Matthieu Reeb, insiste en que seguirán ofreciendo "resolución experta de disputas", el TJUE acumula ya tres golpes consecutivos al statu quo del deporte. Tras los fallos sobre la Superliga y el caso Diarra, esta sentencia refuerza una tendencia: Bruselas no tolerará que las estructuras deportivas operen como feudos autónomos por encima de las leyes comunitarias.
El silencio de la FIFA y el COI contrasta con el murmullo en pasillos jurídicos. Expertos anticipan una oleada de recursos por parte de clubes y atletas que acumulan resentimientos contra decisiones del CAS, especialmente en casos de dopaje y sanciones disciplinarias. Suiza, ese oasis neutral que alberga a los grandes organismos deportivos, acaba de perder parte de su inmunidad legal frente a los tribunales europeos.