Ariadne Díaz enfrentó a un año difícil

México, DF.

Aunque la actriz Ariadne Díaz tuvo un año complicado en lo sentimental y un tanto en lo laboral, aseguró que cierra 2014 con un buen sabor de boca, porque le dejó muchos aprendizajes. El más importante: descubrió el encanto de la soledad y la soltería.
Cierro el año muy agradecida, porque a pesar de lo malo y las dificultades hubo también cosas buenas. Soy de esas personas que culminó 2014 con todo lo que desee para este año”, comentó con optimismo.
A pesar de que en el año que está por acabar dio por terminada su relación sentimental con el actor José Ron, que lejos de entristecerla le trajo una gran enseñanza.
“Sentimentalmente creo que ha sido un año muy afortunado. Nunca había tenido la oportunidad de estar tanto tiempo soltera, y me llevé una grata sorpresa al darme cuenta que es muy interesante tener tanto tiempo para ti, sobre todo cuando estuve en una telenovela tan complicada que necesitaba tanta atención y tiempo.
Ahora puedo compartir más con mis amigos, amigas y con mi familia. En ese aspecto se deja algo y llegan otras cosas; así es la vida, son ciclos. Aprendí a estar sola y también es bueno”, comentó.
En el aspecto laboral también se salió de su zona de confort y dejó los roles tiernos para darle vida a una chica que se enamora de su padrastro, olvidándose de su mamá, tema fuerte para la televisión abierta de nuestro país; esto en la trama de La malquerida.
“En el trabajo me siento afortunada porque independientemente de que le fuera bien o mal a la historia, siempre desee estar muchísimo ahí, porque me pareció un acto muy valiente de la empresa. Hacer esta telenovela rompió con los paradigmas del cuento de hadas.
Aquí la protagonista fue una chava que se enamora de su padrastro, que, a su vez, es asesino, y hay una mamá de por medio. La historia venía a romper con todo. Claro que al principio costó trabajo que la gente lo entendiera, que lo aceptara; sabíamos que era algo que iba a pasar, José Alberto Castro (productor) nos dijo que así sería, que iba a dar mucho de qué hablar, pero finalmente tuvimos gratas sorpresas y vimos que aunque somos un país muy conservador, la siguieron conforme iban pasando los capítulos y más cuando empezó el amor entre Acacia y Esteban (Christian Meier). Este deseo y pasión incrementó el interés del público”, explicó.
La actriz agradece que esta telenovela le dio la oportunidad de salirse de su zona de confort y experimentar nuevos retos.
“Por mucho ha sido la telenovela más complicada en la que he estado, pero al final del día los retos son los que te dejan mejor sabor de boca. Fue un aprendizaje muy interesante, mucha gente logró entender esta complejidad que tenía Acacia, que era una niña muy dulce pero al mismo tiempo era una chava muy sexual; era acomplejada y se sentía abandonada. Amaba a su mamá pero también le tenía resentimiento.
Había tantas gamas en este personaje que lo hizo entrañable para mí y para el público, y es de las mejores experiencias que he tenido”, explicó.

No más TV
Aunque asegura que las telenovelas es lo que más le gusta hacer, declinó una invitación que tuvo por respeto al público.
Hubo una propuesta inmediata para empezar a grabar en enero. Lo agradezco muchísimo, porque es un proyecto padre y, seguramente, le irá muy bien, pero creo que era demasiado pronto para mí y decidí tomarme un tiempo. Cuando trabajas en telenovelas tienes que dejar que ese personaje siga, que la gente acabe de asumir que era pero que ya no lo es, y darle el tiempo al público de depurarse de mí (sic) y que no sienta que todos los personajes los hago igual”, explicó.
Ahora hizo pruebas para integrarse al elenco de otro proyecto que arranca a mediados de año y está esperando respuesta, y mientras esto pasa, Díaz piensa aprovechar el tiempo de la mejor manera.
Por lo pronto me voy a Los Ángeles a estudiar un rato. Generalmente eso es lo que hago entre proyecto y proyecto, porque llegas renovado a la actuación. Seguramente si estando allá surge la oportunidad de hacer pruebas para alguna serie o proyecto, lo haré con mucho gusto. Estaría increíble, pero las novelas me encantan, y aunque hiciera algo allá irremediablemente volveré, porque me gusta estar aquí, es un mercado enorme”, comentó.

Siempre bella
Indudablemente la imagen de Ariadne Díaz es de una mujer bella y sensual. Esto por supuesto no es gratuito, aunque la actriz asegura que se lo debe a la memoria de su organismo que la coloca en una posición privilegiada.
Toda la vida estudié ballet y tengo el cuerpo como muy agradecido. Cuando haces ejercicio por mucho tiempo se guarda una memoria. A veces le echó mucha flojera, pero cuando vuelvo a la actividad de inmediato agarró condición”, presumió.
La alimentación y tomar agua son básicos en su rutina de belleza.
Me doy permiso de comer todo. Desayuno frutas, tengo mi botella de agua siempre, si como pesado en la noche sólo ceno una ensalada. La cosa no está en restringirse en los alimentos sino en comer con moderación, en incluir alimentos que sabes que son buenos”, dijo.
El tener una piel tersa también tiene su secreto: “Dormir bien, siempre lo he dicho y lo diré, una noche de descanso se nota demasiado. Tomar agua como loca; no se trata de tomar un vaso en la mañana y otro en la noche.
No, es traer tu botella bajo el brazo y a cada momento darle traguitos, así todo el día”, expresó.
En cuanto al ejercicio, Díaz confesó que no le gusta si lo ve de esa forma, entonces para activarse piensa en éste como una forma de diversión y en eso Rebeca Rubio, de Televisa Deportes, le ha ayudado mucho porque le hizo conocer el sistema RBK60.
Hace tiempo hicimos una cápsula deportiva, inicialmente dije son cinco minutos, qué puede pasar. Me dejó molida y lo mismo sucedió con una sesión de fotos. No sabes el entrenamiento que te da. Tiene una gran actitud, es una chava admirable que sabe de todo.

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