Alicia Keys se entrega a México
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El Diario de SonoraCDMX
En su debut en la CDMX, Alicia Keys escogió un outfit con el que lució un body de diamantes desde los tacones hasta el gorro y con una gabardina rosa como complemento. La artista lucía como una especie de hechicera, pero sin necesidad de lanzar ningún conjuro; bastó con su presencia para encantar a su público desde que pisó el escenario.
Pocos minutos después de la cita, a las 21:37 horas, la cantante apareció para saldar la deuda que tenía pendiente con sus fans mexicanos, llevando por primera vez su música hasta el país, y no pudo ser mejor momento, pues con su tour Alicia+Keys, la estrella no sólo ofrecería lo más reciente de su trabajo, sino los clásicos a lo largo de su carrera.
Eso explica el por qué su público no sólo la recibió con sold out, sino con los ánimos hasta el tope a sabiendas de todo lo que su ídola vendría dispuesta a ofrecerles.
“Hola, México!”, saludó en español, despertando el rugido de sus seguidores.
“¡Qué especial noche voy a compartir con ustedes! Estoy muy emocionada de estar aquí en mi primera vez, así que hoy quiero que todo lo que los haga sentir mal lo dejen, quiero que se sientan bien, hoy quiero que la pasen excelente”, expresó Keys dando la bienvenida a su show.
Nat King Cole (Unlocked), Truth Without Love, You Don’t Know my Name y Wasted Energy, sonaron junto a su banda en vivo, y desde su piano y bajo su poderosa voz ya había logrado levantar a su público que seguía eufórico sus beats.
Y es que ella misma desprendía una actitud tan relajada y lista para pasarla bien que se contagiaba, y con New Day ya tenía a la audiencia a sus pies, quienes para ese momento ya parecían haber sacudido las malas vibras justo como lo había pedido.
La primera sorpresa de la noche llegó pasado el primer set cuando Keys recibió a un grupo de mariachis en el escenario.
“¿Cómo están, Mexico City? Queremos hacer algo especial esta noche”, anunció.
En sus presentaciones pasadas fueron artista latinas como Karol G y Cazzu quienes tuvieron la suerte de compartir su talento junto a la estrella en otras presentaciones, y bajo el género que representaban los músicos que acababa de aparecer, se podía avecinar quién había sido la elegida para la Ciudad de México.
Así apareció Ángela Aguilar con un vestido negro aterciopelado con flores hasta abajo y un rebozo para entonar su hit Qué agonía, deslumbrando junto a la diva, al principio cantó en solitario y Keys la acompañó meneándose lentamente, pero antes de llegar al final la estadunidense se animó a cantar un par de frases en español, lo que encantó a la audiencia.
Looking for Paradise fue el segundo tema que compartieron; el alegre dúo que sacó junto a Alejandro Sanz, a quien para esta ocasión la mexicana logró suplir a la perfección.
La sorpresa continuó con un medley latino en el que sus músicos lucieron su talento bajo canciones como I Like It Like That y Mi gente, espacio que la intérprete aprovechó para cambiarse.
La distracción funcionó a tal grado que nadie se dio cuenta que se había colocado un pequeño escenario en medio del público, un recuadro desde el cual la artista se colocó para seguir acrecentando la energía, ahora a ritmo de The Gospel.
Rodeada de teclados, tornamesa y luces, pasó de hechicera a Dj Alicia, cuyos beats hipnotizaron a sus fans, quienes seguían su acto con las manos a los cielos y entre coros góspel aquello parecía ya una ceremonia de iniciación al mundo de Keys.
Con la intención de llevar a sus fans hasta sus raíces al barrio de Nueva York en el que nació, la cantante organizó una batalla en la que pedía a su público votar por las versiones originales o mezcladas de temas como Is it Insane, Only You y A Woman’s worth, propuesta que volvió loca a la audiencia.
El último set estaba cerca y para dar una probadita de lo que se avecinaba Alicia pidió encender sus celulares para entonar uno de sus más grandes éxitos y con el deseo cumplido resonó Empire State Of Mind, con la que bajó a pasearse por su público para regresar al escenario principal, tomando las manos de quienes llegaban a alcanzarla en el camino.
La intérprete llevó así a sus seguidores al momento más esperado de la noche donde los satisfizo con poderosas interpretaciones de Girl On Fire, Superwoman y Fallin, deslumbrándolos con sus poderosos agudos e indiscutible talento.
La estrella dejó uno de sus éxitos más queridos para el final cerrando la noche con No One, tema con el que puso a su público a corear a todo pulmón; incluso ella misma quedó sorprendida por la entrega de los mexicanos.
“Gracias por su amor, su entrega, me siento tan agradecida por esta noche. Ha sido algo mágico, esta energía, esto tan lindo, nosotros lo creamos, nosotros lo hicimos.
“¡Te amo, Ciudad de México!”, despidió la artista.
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