Según fuentes cercanas al caso, el abogado Tony Buzbee ha estado llevando a cabo una campaña "cínica y calculada" para forzar el pago de una suma exorbitante de dinero. Sin embargo, el objetivo de esta campaña no es buscar justicia para las víctimas, sino más bien obtener beneficios financieros.
Jay-Z, cuyo nombre real es Shawn Carter, ha presentado una solicitud para desestimar la demanda por agresión sexual que se ha presentado en su contra. En la solicitud, se afirma que el abogado Buzbee ha "levantado acusaciones infundadas" mientras se esconde detrás del seudónimo "Jane Doe".
La demanda original fue presentada en octubre y acusaba a Sean "Diddy" Combs de agresión sexual. Sin embargo, el domingo pasado, la demanda fue modificada para incluir el nombre de Jay-Z como el otro hombre que supuestamente cometió el delito.
Según la demanda, la víctima, que tenía 13 años en ese momento, afirmó que fue llevada a una fiesta en una casa en Nueva York después de los premios VMA en 2000. Allí, se sintió "mareada" después de consumir una bebida y se fue a acostar en un dormitorio. La víctima afirmó que tanto Combs como Jay-Z entraron en la habitación y que Jay-Z le quitó la ropa y la sujetó mientras Combs la agredía sexualmente.
"Estas acusaciones no son sobre justicia para las víctimas. Ni siquiera son sobre dar voz a las víctimas de la violencia sexual", se lee en la solicitud de Jay-Z. "Son simplemente el próximo capítulo en la saga de extorsión del abogado Buzbee, cuyo objetivo es obtener beneficios financieros".
Jay-Z también ha pedido que la identidad de la víctima sea revelada públicamente, ya que considera que la demanda es una forma de extorsión. El abogado Buzbee ha negado estas acusaciones y ha afirmado que la demanda es legítima y que se está buscando justicia para la víctima.
El caso ha generado un gran revuelo en la industria del entretenimiento y ha llevado a que muchos se pregunten sobre la veracidad de las acusaciones. Sin embargo, hasta que se revele más información, es imposible saber qué realmente sucedió.