En el centro de esta historia encontramos a 'Matt', interpretado por el reconocido Tim Allen, un testarudo viudo dueño de un taller de restauración de autos. Su vida da un giro inesperado con la llegada de su hija 'Riley', a quien da vida Kat Dennings, y sus hijos adolescentes. Esta reunión familiar, cargada de años de conflictos y distancia, se convierte en el escenario principal de la serie.
La “química especial” entre Allen y Dennings, según la showrunner y productora ejecutiva Michelle Nader, es la clave para el éxito de la serie. Nader, quien ya colaboró con Dennings en proyectos anteriores como “2 Broke Girls” y “Dollface”, destaca la capacidad de la dupla para conectar con audiencias de diferentes generaciones: “Tim es definitivamente la voz de cierta generación y Kat le habla a otra generación, por lo que podemos explorar esa diferencia generacional”, afirmó Nader en una reciente entrevista.
Más allá de la comedia, la serie aborda temas relevantes como la reconciliación familiar, el duelo, y las complejidades de las relaciones modernas. Se exploran estas temáticas con humor y sensibilidad, evitando caer en el melodrama. La participación de Sean William Scott, quien interpreta a Gabriel, agrega un nuevo elemento a la dinámica familiar, con la posibilidad de una relación romántica que se desarrollará a lo largo de la temporada.
El proceso creativo, según Nader, contó con la activa participación de Allen, quien como productor ejecutivo, aportó su experiencia y visión a la narrativa: “Tim está muy involucrado en el proceso... tiene una voz muy específica”. La serie, además, se presenta como una revisión del clásico formato de sitcom, actualizando su narrativa sin perder la esencia que la ha hecho popular a lo largo de los años.
A lo largo de la temporada, se seguirá el desarrollo del complejo vínculo entre Matt y Riley, mientras ambos enfrentan sus propios desafíos personales. El divorcio de Riley y el proceso de duelo de Matt son algunos de los puntos centrales de la trama. La posibilidad de una segunda temporada se vislumbra en el horizonte, con la evolución de las relaciones entre los personajes y el potencial desarrollo de nuevos arcos narrativos.