En el centro de la controversia se encuentran Blake Lively y Justin Baldoni, quienes protagonizaron y dirigieron, respectivamente, la película "It Ends With Us", adaptación cinematográfica de una novela que aborda el tema del abuso doméstico. La disputa comenzó hace meses, con una demanda por acoso sexual presentada por Lively contra Baldoni. Esta demanda, según documentos judiciales obtenidos por DailyMail.com, alega la creación de un ambiente laboral tóxico durante el rodaje.
Sin embargo, la historia da un giro inesperado. Baldoni, junto a su compañía productora Wayfarer Studios y sus publicistas, han presentado una contrademanda por difamación contra Lively y su esposo, Ryan Reynolds, por una cantidad de $400 millones de dólares. La demanda acusa a Lively de orquestar una campaña para dañar su reputación profesional, alegando que las acusaciones de acoso sexual son falsas. Los documentos legales detallan una serie de eventos que incluyen:
- Acusaciones de que Lively interfirió en la producción de la película, incluso sin haber leído el guion hasta avanzado el rodaje.
- Un incidente en la premier donde Baldoni y su familia fueron confinados en un sótano del lugar.
- Alegatos de que Lively promocionó la película de manera insensible, incluso nombrando un cóctel con el nombre del personaje abusivo de la historia y rehusando reunirse con una organización dedicada a la ayuda de víctimas de violencia doméstica.
La demanda de Baldoni también incluye la presentación de mensajes de texto entre sus publicistas, Melissa Nathan y Jennifer Abel, que supuestamente fueron editados para manipular la narrativa. Estas publicistas afirman haber sufrido amenazas de muerte y abuso antisemita tras las acusaciones iniciales de Lively. Además, se menciona el impacto de los incendios forestales en Los Ángeles en el proceso legal, ya que Baldoni y su equipo fueron notificados de la demanda mientras evacuaban sus hogares.
La situación se complica aún más con una demanda previa de Baldoni contra The New York Times por $250 millones de dólares, por la publicación del artículo que originó la primera demanda de Lively. La batalla legal continúa, dejando abierta la incógnita sobre el desenlace de esta compleja disputa.
El impacto en la recepción de la película "It Ends With Us", a pesar de su éxito de taquilla, no se puede ignorar. Los eventos posteriores al estreno han generado un debate sobre la responsabilidad de los involucrados y el manejo de la publicidad en torno a una película con temas tan delicados como el abuso doméstico.