Es aquí, en este paraíso australiano, donde la actriz Madeleine West se encuentra en un momento crucial de su vida.
Pero la tranquilidad del entorno contrasta con la agitación interna que Madeleine experimenta. A sus 45 años, la estrella de "Neighbours" ha sorprendido a todos con un anuncio inesperado: espera su séptimo hijo. La noticia, revelada a través de una fotografía en Instagram mostrando su creciente vientre, ha generado un torbellino de reacciones.
La publicación, donde luce un top ajustado que deja ver su barriga, incluía la frase: "¡Ups! Pensé que era #perimenopausia. ¡Me equivoqué! Tampoco es demasiado pudín navideño. Y no podría estar más feliz." Un toque de humor que refleja la naturalidad con la que Madeleine asume esta nueva etapa.
Su dieta, sorprendentemente, no parece incluir los antojos típicos del embarazo. En lugar de dulces o comidas exóticas, Madeleine comparte imágenes de sus almuerzos y cenas: grandes frascos con encurtidos de tomate, pepino, calabacín, maíz, remolacha, aguacate y lechuga o cilantro. "Me prometí que si como esto primero, soy libre de comer mi peso en tostadas con Vegemite y Tim Tams", confesó.
Esta nueva maternidad llega una década después de su último parto y en medio de una vida personal compleja. Madeleine comparte la crianza de sus seis hijos – cinco hijas y un hijo – con su expareja, el chef Shannon Bennett. Tras su separación hace dos años, Madeleine se mudó a Byron Bay, adquiriendo una propiedad de $4.6 millones de dólares australianos con vista a Tallow Beach, mientras sus hijos residen con su padre en su mansión cercana.
La actriz, quien recientemente mantuvo una relación de más de tres años con Maximo Bottaro, busca ahora el apoyo de otras madres que han experimentado la maternidad en etapas posteriores de la vida. "¿Cómo rayos vuelves a juntar toda la parafernalia del bebé después de haberlo regalado todo?", pregunta en su publicación, buscando consejos sobre este nuevo desafío.
La historia de Madeleine West es una muestra de resiliencia y valentía. Su decisión de anunciar su embarazo de manera tan pública, abriendo un diálogo sobre la maternidad en la década de los 40, la convierte en un referente para muchas mujeres.