Estamos hablando del enfrentamiento entre Blake Lively y su coprotagonista en "It Ends With Us", Justin Baldoni, envueltos en una guerra legal por acusaciones de acoso sexual. Pero la situación se complica aún más al observar el círculo íntimo de Lively.
Su esposo, Ryan Reynolds, la estrella de Marvel conocida por "Deadpool", es un peso pesado en la industria. Pero su red de apoyo va mucho más allá. Hablamos de amistades con figuras como Taylor Swift, cuya reciente gira "Eras Tour" recaudó más de 2 mil millones de dólares, generando un impacto económico considerable. La amistad entre Lively y Swift data de 2015, incluso se rumorea que Swift incluyó los nombres de los hijos de Lively y Reynolds en algunas de sus canciones, “como un guiño a su estrecha relación”, según fuentes cercanas.
La lista continúa con Gigi Hadid, quien sale con Bradley Cooper; Salma Hayek, casada con François-Henri Pinault, CEO de Kering (dueña de Gucci); John Krasinski y Emily Blunt; y hasta la editora de Vogue, Anna Wintour. Incluso su propia familia participa: su madre, Elaine Lively, trabajó como cazatalentos; su hermana, Robyn Lively, está teniendo un gran momento en series como "Landman" y "Lioness"; y el esposo de Robyn, Bart Johnson, conocido por su papel en "High School Musical".
Además, Lively mantiene una sólida amistad con sus compañeras de reparto en "Sisterhood of the Traveling Pants": Alexis Bledel, America Ferrera y Amber Tamblyn. "Hemos pasado por todo juntas," declaró Tamblyn en una publicación de Instagram, destacando la fuerza de su vínculo.
En los últimos días, el actor italiano Michele Morrone ha salido en defensa de Lively, reflejando la solidaridad del círculo íntimo de la actriz. Morrone, quien trabajó con Lively en la secuela de "A Simple Favor", ha compartido su apoyo públicamente a través de redes sociales.
La batalla legal entre Lively y Baldoni incluye una solicitud de orden de restricción para evitar que se difundan más declaraciones extrajudiciales, lo que refleja la seriedad de las acusaciones y la determinación de Lively de proteger su imagen y su reputación. El juez aún no emite un fallo.
La situación destaca el complejo entramado de relaciones en Hollywood y cómo la red de apoyo de una figura pública puede influir, de manera significativa, en el curso de una controversia.