Kim Kardashian: anillo de 22 quilates eclipsa drama en juicio de París

El evento, que revivió el traumático robo de joyas valoradas en 10 millones de dólares en 2016, tuvo como protagonista a Kim Kardashian, quien se presentó con un atuendo que, lejos de pasar desapercibido, intensificó el interés mediático. Entre las piezas que lucía, destacaba un imponente anillo de diamantes de 22 quilates.
Fuentes cercanas a la celebridad revelaron a la prensa que esta espectacular joya, un verdadero derroche de brillo, fue adquirida con el dinero del seguro que recibió tras el robo. Curiosamente, "supera en tamaño al anillo de 20 quilates que le robaron", comentaron. Este último, un regalo de su entonces esposo, Kanye West, era una actualización de su anillo de compromiso original de 15 quilates, pieza que, según comentó Kim en un reciente episodio de "The Kardashians", "fue la única joya que no llevé a París". El consejo de Kanye de no usar ambos anillos simultáneamente se volvió profético.
Pero el brillo no se limitó al anillo. Kardashian lució también un collar de 3 millones de dólares de Samer Halimeh New York, aros de diamantes de Briony Raymond valorados en 8100 dólares y un delicado tobillo con diamantes, obsequio de su hija North por el Día de la Madre.
La elección de las joyas, según los allegados, no fue casual. Se describe como "una declaración de poder", un acto de afirmación personal en medio del juicio contra los responsables del robo. El juicio, que recordó la noche del robo en el Hôtel de Pourtalès durante la Semana de la Moda de París de 2016, incluyó el desgarrador testimonio de Kim sobre el miedo a ser violada y asesinada. Diez individuos, principalmente de 60 y 70 años, incluyendo al cabecilla Yunis Abbas, fueron acusados en relación con el robo.