Sebastián Ligarde: La conmovedora historia de adopción de su hijo a los 70 años

Recientemente, en una entrevista con la periodista Matilde Obregón, Ligarde compartió detalles íntimos sobre su vida familiar, revelando un aspecto conmovedor de su historia: la adopción de su hijo, Luis. No se trata de una historia común; es un relato de segundo acto, de un amor que florece en un momento inesperado.
"Los dos tomamos la decisión porque lo adoptamos ya grande, tenía 17 años. Entonces no nos tocó esa primera parte, pero nos tocó esa parte en donde más nos hizo falta tener un hijo, que fue llegar a los 60 o 70 años," explicó Ligarde, matizando la experiencia de formar una familia en una etapa madura de sus vidas. Esta decisión, tomada junto a su esposo, se cimentó en la conexión inmediata que sintieron con Luis, un joven que, según describe el actor, desbordaba amabilidad y cariño.
Ahora, a sus 32 años, Luis es descrito por sus padres adoptivos como un joven excepcional: "Ahorita, para mí, Luisito es mis piernas, mis brazos, ya no puedo hacer muchas cosas... Es un muchacho maravilloso, ni hace drogas, no sale de antro, juega en la tele, limpia la alberca, los animales lo adoran, vive con nosotros. Él está muy allegado a nosotros."
La historia de su adopción, lejos de ser una simple transacción legal, es un testimonio de una búsqueda de conexión y amor. Se conocieron en clases de actuación. La atención y el cariño que Luis mostraba hacia Ligarde y su esposo llamaron su atención.
El pasado de Luis, marcado por un padre alcohólico y violento, añade una capa de complejidad a la narrativa. "Él tenía un padre alcohólico que maltrataba mucho a los hijos y a su mamá. El papá la amenazaba con pistolas, en una de esas se fueron a Chicago, cruzaron el desierto caminando cuando Luis tenía nueve años," reveló Ligarde, pintando un cuadro de la infancia difícil que Luis superó para encontrar un hogar amoroso.
La decisión de adoptarlo, fruto de una conversación con la madre de Luis, selló un vínculo familiar profundo y significativo. Una familia construida en el amor, en la confianza y en la aceptación mutua, lejos de los estereotipos convencionales.