¿Identidad móvil?, lejos de México

MÉXICO, DF.

Nuestro país presenta algunos atrasos para empezar a eliminar tarjetas.
Los gobiernos de varias naciones han encontrado en la identidad móvil una opción para  mejorar su administración y el servicio que otorgan a la población. México es uno de los países que está analizando esta posibilidad y ya ha dado algunos pasos en esa dirección, sin embargo se encuentra lejos de contar con las condiciones óptimas para implementar una plataforma de este tipo, consideró el gerente de marketing de producto para América Latina Telecom de Gemalto, Carlos Romero.
La figura de identidad móvil que han implementado países como Finlandia o Noruega se refiere a utilizar los teléfonos celulares como un método de identificación para acceder a servicios públicos o privados.
Esto es posible porque la SIM del teléfono celular guarda la información del usuario y, a través de un código o contraseña de cuatro números que sólo conoce el dueño del dispositivo, puede ocuparlo para pagar sus impuestos, para identificarse en el hospital e incluso para que puedan ver su historial clínico o para hacer una transferencia bancaria.
De esta manera, explicó Romero, se elimina el uso de plásticos como las tarjetas de crédito o la credencial de elector, toda la administración de información se hace de manera electrónica y se simplifica el tiempo de los trámites y servicios.
“En el caso de México estamos haciendo algunos acercamientos, sólo hay que entender bien la idea del proyecto que tiene tres partes”, aseguró el gerente en entrevista con Excélsior.
Gemalto es una de las empresas, junto con GSMA y la Secure Identity Alliance, que está promoviendo los beneficios de aplicar este tipo de plataformas y creando tecnología que mejore las plataformas.
Romero detalló que la primera parte para instalar una plataforma de este tipo es que los operadores de telefonía móvil se conviertan en los proveedores de acceso, es decir, cuenten con la tecnología para permitir que la tarjeta SIM de los celulares cuente con toda la información necesaria para identificar al usuario y pueda tener acceso a los servicios.
Las siguientes dos etapas son más complejas porque involucra que más entidades u organizaciones brinden servicios tomando en cuenta la identidad móvil y, sobre todo que exista una regulación.

México, aún atrasado
El experto de Gemalto indicó que en América Latina hay dos países que están muy
avanzados y pronto podrían adoptar la identidad móvil. Se trata de Costa Rica, que ya tiene regulada la identidad electrónica y tiene posibilidad de migrar a identidad móvil en los próximos años, así como Chile que ya también cuenta con un marco legal y su avance en esta materia podría verse en los siguientes dos años.
En México un paso importante hacia esta tendencia se ha visto en el sector tributario con la creación de la Firma Electrónica Avanzada, sin embargo todavía se carecen de otros factores como la legislación que haga válida esta identidad y que regule su uso; que las empresas de telefonía y los operadores móviles virtuales decidan convertirse en proveedores y que se sumen más organizaciones y entidades.
“Los métodos electrónicos hay que pasarlos a otras entidades como la salud pública, luego a instituciones privadas, para después ocuparlo en el registro de población y hasta sería posible que la credencial de elector sea electrónica en las siguientes elecciones”, recomendó Romero.
Aunque aceptó que en México este proceso tomará tiempo, al menos un sexenio, y el país seguirá por detrás de otros sobre todo europeos que ya están ocupando estas plataformas.

Interesa a los operadores móviles
Un factor esencial para que funcione la identidad móvil es que los operadores de telefonía celular decidan convertirse en proveedores, algo que el especialista de Gemalto ve muy probable. 
Muestra de esto es que los operadores en México están buscando como extender su negocio a otro tipo de servicios, transformarse no sólo en proveedores de conectividad.

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