ONU apoya paz en Siria

ONU.

Incluye negociar con damasco pero deja fuera al presidente Basar Asad.
Los miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobaron el viernes una resolución que esboza un proceso de paz para Siria e incluye negociaciones entre el gobierno en Damasco y la oposición, pero el borrador no menciona el asunto crucial de qué papel desempeñará el presidente Basar Asad.
La resolución reconoce que el proceso de paz no pondrá fin al conflicto porque le prohíbe a los “grupos terroristas” que operan en el país, incluidos el Estado Islámico y el Frente Nusra, participar en un cese al fuego.
La resolución ha sido descrita como un inusual gesto de unidad sobre el proceso de paz en Siria por un consejo que con frecuencia se encuentra profundamente dividido respecto a la crisis.
Cancilleres de 17 países se reunieron intermitentemente durante más de cinco horas para superar las divisiones que tenían en torno al texto.
El borrador de la resolución, obtenido por The Associated Press, solicita que el secretario general de la ONU Ban Ki-moon convoque a representantes del gobierno sirio y de la oposición “para que se comprometan en negociaciones formales de un proceso de transición política de forma urgente, teniendo como objetivo que a principios de enero de 2016 comience el diálogo”.
En un periodo de seis meses, el proceso debería establecer “un gobierno confiable, inclusivo y no sectario” y Naciones Unidas supervisará “las elecciones libres e imparciales” a efectuarse dentro de los próximos 18 meses.
El documento señala que la transición será liderada por los sirios y controlada por ellos, y hace énfasis en que el “pueblo sirio decidirá el futuro de Siria”.
El borrador también señala que los esfuerzos de cese al fuego deberían avanzar de manera paralela con las negociaciones, y solicita a Ban que reporte tras un mes de la adopción de la resolución sobre una manera de supervisar el cese al fuego.
El texto advierte que dicho alto en las hostilidades “no se aplicará a acciones ofensivas o defensivas” contra grupos considerados organizaciones terroristas, lo que significa que los ataques aéreos de Rusia, Francia y la coalición encabezada por Estados Unidos aparentemente no se verían afectados.

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