CANADÁ.
La policía canadiense anunció la muerte de nueve personas en Edmonton, dos de ellos menores, en diferentes puntos de la ciudad como consecuencia de “trágicos incidentes de violencia doméstica”.
El jefe de la policía de Edmonton, Rod Knecht, dijo que aunque las fuerzas de seguridad todavía investigan lo sucedido, la hipótesis es que el autor de los asesinatos se suicidó a primera hora de ayer.
“Estos sucesos no parecen estar relacionados con bandas criminales sino que son trágicos incidentes de violencia doméstica”, explicó Knecht.
Según el relato proporcionado por Knecht, ayer un individuo entró armado a una vivienda de Edmonton y mató a tiros a una mujer.
Poco después, la policía recibió una llamada relacionada con un individuo del que su familia temía que estaba deprimido y con tendencias suicidas.
La policía acudió a la vivienda, pero al no recibir respuesta y no observar nada sospechoso, los agentes abandonaron la dirección sin entrar en el domicilio.
Pero poco después de la medianoche, la policía regresó al domicilio, donde encontró los cuerpos de siete personas, entre ellos dos menores a los que Knecht describió como un niño y una niña de “muy poca edad”.
Finalmente, la policía ubicó en la localidad de Ford Saskatchewan un vehículo relacionado con el individuo, cuya familia había alertado presentaba señales de depresión y que estaba asociado con el primer asesinato.
En el interior de un restaurante, los agentes localizaron el cadaver del sospechoso de las ocho muertes.