Al menos 142 personas han muerto, y más de cien han resultado heridas, este viernes en dos atentados suicidas perpetrados contra dos mezquitas de la capital de Yemen, Saná, donde asisten habitualmente los simpatizantes de los rebeldes huthis que controlan la ciudad, según fuentes oficiales. El atentado ha sido reivindicado por los yihadistas del Estado Islámico.
Un testigo ha escuchado al menos dos explosiones en una de las mezquitas, la de Badr, situada en un barrio del centro de la capital densamente poblado.
Iba a rezar en una de las mezquitas cuando escuché la primera explosión y un segundo después escuché otra», ha explicado este testigo a la agencia Reuters. Los hospitales de Saná han pedido inmediatamente donaciones de sangre para ayudar al gran número de heridos por las detonaciones.
Los huthis llevan semanas controlando la capital y han forzado al presidente Abd Rabbu Mansur Hadi a abandonar la ciudad y a establecer una sede de Gobierno temporal en la ciudad de Adén.
Hadi sospecha que detrás de la ofensiva de los huthi se encontraría su predecesor en el cargo, Alí Abdulá Salé, a quien ha acusado esta semana de intentar perpetrar un golpe de Estado al atacar su complejo presidencial en la ciudad costera.
Un avión militar atacó este jueves el palacio donde se ha instalado Hadi desde que huyó, en febrero, de Saná. La capital permanece tomada desde septiembre de 2014 por los rebeldes huthis, a los que ha respaldado Salé, informa Ep.