Nueva York.
El secuestro de más de 200 niñas ocurrido hace un año capturó la atención del mundo e inspiró el hashtag #BringBackOurGirls, pero los horrores de los niños en Nigeria continúan desde entonces.
“Cerca de 800,000 niños han sido forzados de huir de sus casas como resultado del conflicto en el noreste de Nigeria entre las fuerzas de Boko Haram y grupos de defensa civiles”, informó Unicef este lunes.
El “número de niños huyendo por sus vidas en Nigeria o cruzando la frontera con Chad, Níger y Camerún se ha duplicado en menos de un año”, agregó, al dar a conocer un reporte sobre la crisis llamado Missing Childhoods (Infancias perdidas).
A la par, el organismo lanzó una campaña de redes sociales usando el hashtag #BringBackOurChildhood, en el que se comparten imágenes de niños de Nigeria, Chad, Níger y Camerún. Estos mensajes pueden verse en Facebook, Twitter, Instagram y Tumblr.
Más de 1.5 millones de personas han dejado sus casas debido a la violencia, de acuerdo con Unicef. Cerca de 1.2 millones se desplazaron de forma interna, mientras el resto han cruzado a Camerún, Chad y Níger.
“La mayoría de los desplazados, más de 880,000 están en comunidades que los recibieron y con poco acceso al apoyo humanitario, lo que pone mayor presión a los ya de por si deficientes servicios de salud, educación y sociales”, de acuerdo con Unicef.
Leer: El dolor es insoportable: padres de niña nigeriana
El 14 de abril de 2014 el grupo Boko Haram realizó los secuestros en una escuela de niñas en Chibok, acto que “es solo una de las tragedias sin fin que se están replicando a escala épica a través de Nigeria y la región”, dijo Manuel Fontaine, director regional para África Central y del Oeste de Unicef.