Riad.
Al menos 22 personas murieron en el atentado al este de Arabia Saudita.
Un atentado suicida cometido en una mezquita chiíta en el este de Arabia Saudita durante la oración semanal y reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI), dejó al menos 22 muertos, según el Ministerio del Interior.
El EI reivindicó el atentado horas después de su realización. “Los soldados del califato” son los autores del atentado, afirmó el grupo en un comunicado difundido por portales islamistas.
El grupo afirma que el atentado lo cometió un hombre llamado Abu Amer al Najdi, al estallar un cinturón de explosivos que llevaba puesto, y publica una foto de este hombre.
Promete “días sombríos” para los chiítas hasta que los “soldados del EI” los “echen de la península arábiga”.
Previamente, el portavoz del Ministerio, citado por la agencia oficial SPA, afirmó que “un individuo hizo detonar una bomba que llevaba bajo su ropa durante la oración del viernes, en la mezquita Ali Ibn Abi Taleb en Kudehi, una localidad de la provincia de Qatif”.
Los servicios de emergencia desalojaron a las víctimas y el atentado está siendo investigado, agregó.
El portavoz también reafirmó la determinación de los servicios del Ministerio de “acorralar a toda persona implicada en este crimen terrorista, perpetrado por personas que buscan atentar contra la unidad nacional, y llevarla ante la justicia”.
El muftí saudita, una autoridad religiosa, denunció el atentado en la televisión El Ejbariya: “Es un acto criminal destinado a abrir una brecha entre los hijos de la nación (...) y a propagar los problemas en nuestro país”.
El diario Arryadh publicó fotos de cuerpos sobre charcos de sangre y del techo de la mezquita, que se hundió en parte a causa de la explosión.