Kentucky
Un tren se descarriló y derramó una sustancia química en una zona remota del este de Kentucky el pasado miércoles, por lo que las autoridades alentaron a los residentes de un pequeño poblado a evacuar en medio de preocupaciones sobre la calidad del aire.
El gobernador Andy Beshear dijo en un comunicado que las autoridades del condado Rockcastle estaban alentando a los residentes de Livingston, con una población de aproximadamente 200 habitantes, a evacuar. Medios de noticias reportaron que un refugio fue abierto en las instalaciones de una escuela secundaria.
El descarrilamiento que involucró al menos 16 vagones ocurrió alrededor de las 2:30 de la tarde, según Bryan Tucker, portavoz del operador ferroviario CSX. Dos de los vagones descarrilados llevaban azufre fundido, que se incendió tras la caída de los vagones, dijo Tucker en un comunicado enviado por correo electrónico. La compañía aún trabajaba para extinguir el incendio hasta el miércoles por la noche, indicó.
Se cree que el incendio está liberando dióxido de azufre, pero la cantidad no se confirmará hasta que se tomen medidas con el equipo de monitoreo del aire que se estaba desplegando el miércoles por la noche, añadió Tucker.
Según el sitio web de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés), el dióxido de azufre puede causar problemas respiratorios, dependiendo de la concentración y la duración de la exposición. El gas se produce comúnmente quemando combustibles fósiles en plantas de energía y otros procesos industriales, de acuerdo con la EPA.
John Mura, portavoz del Gabinete de Energía y Medio Ambiente estatal, dijo no tener más información sobre la cantidad de sustancias químicas liberadas.
WKYT-TV reportó que un empleado del tren fue atendido en el lugar por heridas leves.
Beshear declaró el estado de emergencia en el condado.
“Al emitir un estado de emergencia, garantizamos que todos los recursos estatales estén disponibles para ayudar a mantener seguras a nuestras familias”, dijo Beshear.
Instó a la población a no acudir al área para permitir que las autoridades estatales y locales realicen sus tareas.