Al menos 13 personas perdieron la vida el martes tras el fatal accidente de un autobús que transportaba a más de 40 pasajeros. El Ministerio de Salud de Perú confirmó la devastadora noticia, señalando que también hubo una decena de heridos en el suceso. El trágico incidente tuvo lugar en la madrugada en la sinuosa carretera Libertadores, mientras el autobús, de dos pisos, se dirigía desde Lima hacia la ciudad de Ayacucho.
En un giro angustioso del destino, el vehículo volcó y se precipitó por un barranco, rodando cientos de metros antes de quedar boca abajo. Los heridos fueron trasladados rápidamente al hospital de Ayacucho, donde recibieron atención médica urgente. Lamentablemente, este tipo de accidentes no son raros en las carreteras peruanas.
Es conocido, que factores como el exceso de velocidad, el mal estado de las vías y la falta de señalización, combinados con un control insuficiente por parte de las autoridades, contribuyen a la peligrosidad del tráfico. Esta tragedia recuerda al trágico suceso ocurrido el pasado 30 de abril, cuando otro autobús se precipitó por un barranco en la región de Cajamarca, cobrando la vida de al menos 25 personas.
Las estadísticas oficiales son igualmente alarmantes: en 2023, Perú registró un total de 3,138 muertes debido a accidentes de tránsito, según datos del Ministerio de Transportes. Es preocupante notar que el 70% de estos accidentes se deben a factores humanos, como la inexperiencia o la fatiga del conductor. Este nuevo incidente subraya la urgencia de abordar los problemas de seguridad vial en Perú.