La semana pasada, la tormenta tropical Debby azotó el área de Tampa Bay. No solo trajo fuertes vientos y lluvias, sino que también provocó la huida de un búho cornudo de su recinto en Brandon.
Charlie, un búho cornudo de cuatro años, se había escapado el 5 de agosto, durante el paso de Debby. Su desaparición generó una intensa búsqueda que involucró a más de 2.300 personas, quienes se movilizaron en vuelos y recorridos a pie. Incluso se utilizaron 500 llamadas a las puertas de las casas para tratar de encontrarlo.
El lunes, después de casi dos semanas de búsqueda, la buena noticia llegó a oídos de los voluntarios. Una llamada al Centro de Rapaces de la Bahía de Tampa reportó que Charlie había sido visto en un patio trasero a las 8:30 de la mañana. Un video muestra a una persona acercándose al búho para finalmente recuperarlo.
Le llevará un tiempo recuperarse de esta terrible experiencia. Está muy delgado. Ha comido un poco y está muy contento de estar en casa, compartió el Centro de Rapaces de la Bahía de Tampa.El regreso de Charlie a su hogar, después de una búsqueda que involucró a cientos de personas, es un ejemplo de la pasión y la determinación que se pueden encontrar en las comunidades para proteger a la vida silvestre. A pesar de los desafíos, el éxito de la búsqueda de Charlie es una buena noticia que nos recuerda que la perseverancia puede lograr resultados positivos.