Pero bajo esta aparente tranquilidad se esconde un peligro invisible: la influenza aviar.
Recientemente, las autoridades sanitarias de California confirmaron un tercer caso de influenza aviar en humanos, un hecho que ha puesto en alerta a la población. El paciente, residente de la Central Valley, contrajo la enfermedad tras el contacto con ganado lechero infectado.
Para tranquilidad de los habitantes, la influenza aviar H5 aún se considera un riesgo bajo para la población en general. Sin embargo, las autoridades sanitarias mantienen una vigilancia estrecha.
Además del caso confirmado, se investigan dos posibles casos adicionales en la misma región.
Según el Departamento de Salud Pública de California (CDPH), no se ha encontrado un vínculo entre los casos confirmados o posibles, lo que sugiere que la transmisión del virus se produce principalmente de animales a humanos.
Los síntomas que presentan las personas pueden variar desde leves hasta graves, comenzando comúnmente con fiebre alta y escalofríos. Además, se pueden manifestar tos seca, dolor de garganta, dolores musculares y una notable fatiga. En algunos casos más severos, los afectados pueden experimentar dificultad para respirar, lo que indica complicaciones pulmonares.
Es importante recordar que la influenza aviar es una enfermedad que afecta principalmente a las aves, pero que puede transmitirse a otros animales, incluyendo mamíferos como las vacas.
La buena noticia es que, hasta el momento, no se han reportado hospitalizaciones relacionadas con el virus.