La batalla contra la contaminación plástica se intensifica en Los Ángeles. El condado, cansado de las promesas vacías y la desinformación, ha decidido tomar cartas en el asunto. Una poderosa demanda contra dos gigantes de la industria refresquera, Coca-Cola y PepsiCo, está sacudiendo las bases del mercado de bebidas.
La acusación es contundente: engañar al público sobre la reciclabilidad y el impacto ambiental de sus botellas de plástico. La demanda, presentada por el abogado del condado Dawyn R. Harrison en nombre del pueblo de California, afirma que estas empresas han vendido una imagen falsa de responsabilidad ambiental, utilizando la frase "reciclable" a pesar de saber que las botellas de plástico tienen un ciclo de vida limitado y generan un impacto negativo en el medio ambiente.
La demanda no se limita a la contaminación plástica. También acusa a las empresas de no revelar los graves daños a la salud que derivan de la producción y el uso de estos envases. "Estas empresas han estado contaminando nuestro condado y nuestro planeta durante años", señala la demanda, "es hora de que rindan cuentas".
La demanda, que busca restitución para los consumidores y sanciones civiles de hasta $2,500 por violación, ha desatado una polémica que pone en el centro del debate la responsabilidad social de las grandes empresas. Las acusaciones apuntan a una estrategia de marketing engañosa, en la que se utiliza el concepto de "economía circular" para dar la impresión de que el reciclaje puede compensar el daño ambiental.
La denuncia, disponible en el Tribunal Superior de Los Ángeles, ha puesto a la industria de las bebidas en la mira, y ha generado un debate sobre la sostenibilidad de los envases de plástico y la responsabilidad de las empresas en la lucha contra la contaminación.