Imaginen un domingo cualquiera en San Bernardino, un día soleado como tantos otros. Pero ese domingo, la tranquilidad de Perris Hill Park se vio interrumpida por un macabro descubrimiento.
Los bomberos, acudiendo a un llamado de apuñalamiento, encontraron a un hombre sin hogar, tirado en el suelo, rodeado de una escena que no dejaba lugar a dudas: el hombre había sido atacado brutalmente. Las heridas de arma blanca eran evidentes, pero no fueron las únicas que recibió. Mordeduras de perro cubrían su cuerpo, revelando una lucha desesperada por la supervivencia.
La policía de San Bernardino, con la ayuda de los equipos de bomberos, trasladaron al hombre a un hospital cercano, pero desafortunadamente, sus heridas fueron demasiado graves. Su muerte fue declarada poco después.
Las autoridades, que aún no han revelado la identidad del hombre, iniciaron una investigación para esclarecer los hechos. Los perros que se encontraban en la escena fueron localizados y puestos bajo custodia, pero no se ha dado a conocer ninguna información sobre posibles sospechosos.