Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel, se mostró exultante al felicitar a Trump por "el mayor regreso de la historia". Considerando a Trump el mejor amigo que Israel ha tenido, Netanyahu destacó su apoyo "inequívoco" al país durante su primer mandato.
Por su parte, Emmanuel Macron, presidente de Francia, manifestó su compromiso con una Europa más unida y fuerte, señalando que trabajará por una Europa "más soberana" en este "nuevo contexto". A pesar de su compromiso con la unidad europea, Macron también felicitó a Trump y se mostró dispuesto a colaborar con él "como lo hemos hecho durante cuatro años".
El canciller alemán, Olaf Scholz, reconoció que el nuevo gobierno de Trump será diferente al de la administración Biden-Harris, pero aseguró que Alemania seguirá siendo un "socio transatlántico confiable" para Estados Unidos. Scholz destacó la importancia de "alinear nuestras posiciones" y fortalecer la comunicación con Washington, especialmente en el contexto de la guerra en Ucrania.
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, también felicitó a Trump y destacó la "verdadera asociación" entre la Unión Europea y Estados Unidos, basada en "una agenda transatlántica fuerte que siga entregando resultados" para los ciudadanos de ambas regiones. Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, coincidió con von der Leyen, resaltando la "alianza duradera" y el "vínculo histórico" entre la UE y EE.UU.
En América Latina, varios líderes también extendieron sus felicitaciones a Trump. Giorgia Meloni, primera ministra de Italia, destacó la "alianza inquebrantable" entre Italia y Estados Unidos, mientras que Viktor Orban, primer ministro de Hungría, calificó la victoria de Trump como "el mayor regreso en la historia política de EE.UU."
En contraste con el entusiasmo de algunos líderes, el Gobierno iraní afirmó que "no hay diferencias significativas" en quién se convierta en presidente de Estados Unidos. La portavoz del Gobierno iraní, Fatemeh Mohajerani, señaló que las "políticas generales de Irán y Estados Unidos son consistentes" y que las medidas necesarias "han sido planificadas con antelación".
Volodymyr Zelensky, presidente de Ucrania, felicitó a Trump y elogió su compromiso con la "paz a través de la fuerza". Zelensky recordó su reunión con Trump en septiembre, donde discutieron la "asociación estratégica" entre Ucrania y Estados Unidos. A pesar de que Trump insinuó durante su campaña que pondría fin al apoyo a la guerra de Kyiv, Zelensky se mostró optimista sobre el "fuerte apoyo bipartidista" que Ucrania seguirá recibiendo de Estados Unidos.
Por su parte, Vladimir Putin, presidente de Rusia, no tiene planes de felicitar a Trump. Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, argumentó que Rusia considera a Estados Unidos un "país hostil" involucrado "directa e indirectamente" en la guerra contra Rusia. Peskov también destacó la importancia de analizar "palabras y acciones específicas" de Trump antes de dar una evaluación oficial de su victoria.
China, a través de su Ministerio de Asuntos Exteriores, felicitó a Trump y "respetó la elección del pueblo estadounidense". Xi Jinping, líder chino, aún no ha comentado públicamente los resultados de las elecciones.
Mohammed bin Salman, príncipe heredero de Arabia Saudita, hablando con Trump, expresó "los mejores deseos para el pueblo estadounidense bajo su presidencia" y reiteró la "relación histórica entre el Reino de Arabia Saudita y Estados Unidos".
Mientras los líderes mundiales envían mensajes de felicitación a Trump, sus asistentes están trabajando frenéticamente para organizar posibles reuniones con el presidente electo en los próximos meses. Los líderes mundiales están abiertos a todas las opciones, incluyendo viajes a Nueva York o Mar-a-Lago. Muchos de ellos están considerando reuniones antes de la inauguración de Trump en enero.