TPS y asilo: diferencias clave en el estatus migratorio en Estados Unidos

El epicentro del problema radica en una decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos relacionada con el Estatus de Protección Temporal (TPS). Específicamente, el fallo del 20 de mayo de 2025 avaló la revocación del TPS otorgado a venezolanos en 2023. Esto deja en una situación vulnerable a quienes se registraron bajo esta segunda designación, mientras que aquellos que obtuvieron el TPS en 2021 mantienen su protección, según reportes de CNN.
¿Qué significa esto en la práctica? Miles de venezolanos podrían perder su estatus legal y los beneficios asociados, incluyendo los permisos de trabajo. La abogada Lady Junek, citada por CNN, ha señalado que el TPS está sujeto a decisiones políticas y diplomáticas, lo que deja a los beneficiarios expuestos a cambios administrativos repentinos. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) aún no han emitido directrices sobre la implementación de la revocatoria, generando mayor inquietud.
En este panorama complejo, la diferencia entre el TPS y el asilo político cobra vital importancia. Mientras el TPS es una medida temporal otorgada por el Ejecutivo, el asilo político se basa en el derecho internacional y se evalúa caso por caso, ofreciendo la posibilidad de obtener la residencia permanente. El asilo protege a quienes han sufrido o temen sufrir persecución por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a un grupo social particular u opiniones políticas, según el USCIS.
Una de las diferencias cruciales reside en la temporalidad: el TPS tiene una duración limitada, mientras que el asilo puede ser permanente. Además, el proceso de solicitud difiere significativamente. El TPS requiere demostrar la nacionalidad de un país designado y presencia continua en EE.UU. desde una fecha específica. El asilo, en cambio, exige pruebas de persecución, testimonios y documentos, con una evaluación individualizada. Existen dos modalidades de solicitud de asilo: asilo afirmativo y asilo defensivo, según la Oficina Ejecutiva para la Revisión de Inmigración (EOIR).
Para aquellos que pierden el TPS, el asilo se presenta como una alternativa, pero no la única. Otras opciones, aunque con un panorama menos claro, incluyen solicitudes de visas humanitarias o familiares, y el retorno voluntario. La incertidumbre, sin embargo, prevalece hasta que el DHS aclare el procedimiento a seguir tras la decisión de la Corte Suprema. La situación deja a miles de venezolanos en un limbo legal, obligándolos a navegar un complejo sistema migratorio en busca de una solución.