Trump impone fuertes multas a inmigrantes por no cumplir con deportación

La administración de Donald Trump ha implementado una nueva norma que establece multas significativas para los inmigrantes indocumentados que ingresen ilegalmente a Estados Unidos o no cumplan con las órdenes de deportación. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS), en conjunto con el Departamento de Justicia (DOJ), anunció que estas sanciones forman parte de una estrategia para incentivar la autodeportación y reducir la población migrante sin estatus legal en el país.
Según la norma, las multas oscilan entre 100 y 500 dólares por cruzar ilegalmente la frontera, hasta casi 10,000 dólares por incumplir una orden de salida voluntaria, y hasta 998 dólares diarios por desobedecer intencionalmente una orden de deportación. Además, se eliminará el plazo de notificación de 30 días previo a la imposición de sanciones, agilizando el proceso y permitiendo que las multas se notifiquen por correo postal, con un procedimiento reducido para quienes decidan impugnarlas.
La subsecretaria del DHS, Tricia McLaughlin, destacó que estas medidas buscan reforzar el cumplimiento de las leyes migratorias y motivar a los indocumentados a abandonar voluntariamente el país mediante la aplicación CBP Home. Desde junio, ICE ha emitido casi 10,000 avisos de multas por incumplimiento de salida, lo que refleja el énfasis del gobierno en la aplicación estricta de las normas migratorias, incluyendo detenciones, deportaciones y sanciones económicas.
Sin embargo, la medida ha recibido críticas por parte de grupos defensores de los derechos humanos, que argumentan que las multas son difíciles de pagar para muchos inmigrantes con empleos precarios y pueden agravar su situación. Señalan que estas sanciones podrían ser una carga excesiva y cuestionan la eficacia de las políticas punitivas en la gestión migratoria.