La comunidad universitaria de Guadalajara se vio sacudida por una tragedia cuando se descubrió el cuerpo sin vida de una estudiante de 22 años en el Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad de Guadalajara, en Zapopan. Las autoridades confirmaron que la joven se encontraba sin vida dentro de un auto estacionado en los límites del campus universitario.
Los informes sugieren que la joven habría tomado la trágica decisión de quitarse la vida, dejando atrás una carta póstuma a sus seres queridos. El comunicador y profesor de la UDG, Omar García, utilizó sus redes sociales para compartir la trágica noticia, revelando que la madre de la víctima había confirmado que su hija estaba luchando contra un cuadro depresivo.
Este testimonio subraya la importancia de abordar de manera más seria las dificultades de salud mental que enfrentan los estudiantes. El vehículo donde se encontró el cuerpo estaba estacionado correctamente en los espacios designados del campus, en la intersección de la avenida Parres Arias y Periférico Norte. Fue un transeúnte quien, al percatarse de la situación, alertó a las autoridades.
Las autoridades universitarias, junto con las fuerzas del orden, acudieron al lugar de los hechos para iniciar una investigación. Se solicitó la intervención de peritos del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses para determinar las circunstancias exactas. A medida que la noticia se propagaba por el campus, profesores y compañeros de clase expresaron su profundo pesar por lo ocurrido.
Además, instaron a las altas esferas de la UDG a fortalecer sus esfuerzos en la promoción de la salud mental. Este trágico incidente sirve como un recordatorio de la importancia de brindar un entorno de apoyo y comprensión para aquellos que luchan contra problemas de salud mental dentro de las instituciones educativas.