Después de una investigación de más de siete meses, la Comisión de Justicia Partidaria y la Comisión Permanente del PRI han tomado la decisión de expulsar al ex gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, por lo que se considera una traición al partido. Se le culpa de haber entregado la entidad al gobierno de Morena, después de que Delfina Gómez resultara ganadora de los últimos comicios electorales.
La determinación se basa en la supuesta colaboración de Del Mazo con otros partidos políticos, lo que habría coadyuvado en la entrega del gobierno estatal a la 4T, según lo informado por la Comisión Política Permanente del PRI nacional. Se valoró su relación con el presidente Andrés Manuel López Obrador y se sugirió que podría haber ocupado algún cargo diplomático.
Del Mazo ha respondido destacando la trayectoria de su familia en el partido y culpando al dirigente del PRI, Alejandro Moreno, de su expulsión, a quien acusa de ser "nada confiable, un mentiroso, cínico y traidor".
No era mi voluntad manifestarme, pero ante la provocación expreso lo siguiente: pic.twitter.com/gqyUkE3kYF
— Alfredo Del Mazo (@alfredodelmazo) May 31, 2024
Este episodio marca el fin de un ciclo histórico para la familia Del Mazo, que ha tenido tres generaciones de gobernantes en el Estado de México. La salida de Del Mazo del PRI ha sido precedida por críticas internas al ex mandatario estatal por no apoyar a la ex candidata del partido a la gubernatura, Alejandra Del Moral Vela, durante el proceso electoral de 2023. Su renuncia reciente al PRI ha reavivado las críticas hacia Del Mazo, con la líder estatal del partido, Ana Lilia Herrera Anzaldo, afirmando que esto confirma la entrega del Estado de México.