La polémica se desató por las inconsistencias en el proceso y las acusaciones de falta de transparencia. En medio de esta vorágine, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo se pronunció durante la mañanera del 24 de octubre, ofreciendo su perspectiva sobre el tema.
Sheinbaum Pardo reconoció la complejidad del proceso de reforma, admitiendo que hubo errores en la notificación de la resolución judicial. Sin embargo, señaló que el Tribunal Electoral ya resolvió el conflicto, y el INE continuará con el proceso.
En cuanto al cuestionamiento sobre la existencia de un Estado de derecho en su administración, la presidenta se defendió con vehemencia. "La cuarta transformación busca separar el poder económico del poder político, algo que antes no existía", aseguró. Según Sheinbaum Pardo, esta separación es fundamental para garantizar un estado de derecho que beneficie al pueblo.
Para fortalecer su argumento, la presidenta destacó la propuesta de elegir jueces y juezas por parte del pueblo, una medida que, a su juicio, terminará con la corrupción y el amasiato entre el poder económico y el poder político.