En medio de este debate, la postura de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo ha generado gran interés.
La mandataria, en su conferencia matutina del 7 de noviembre, ha dejado clara su postura sobre la pena de muerte, un tema que surge en el contexto de la propuesta legislativa. Sheinbaum Pardo se ha posicionado en contra de la pena capital, argumentando que "es una práctica que viene de los liberales mexicanos y que no se aplica en México".
Si bien la presidenta se opone a la pena de muerte, reconoce la gravedad de los delitos contra niños. "Se deben considerar delitos graves, especialmente en los casos de violencia familiar", afirmó Sheinbaum Pardo.
La mandataria también ha enfatizado la necesidad de la prevención y la atención a las causas de la violencia contra niños, proponiendo que se implementen mecanismos para detectar estos casos desde la escuela y otros entornos.