Crimen en Culiacán: Hallan cuerpo encobijado, investigan homicidio de Jairo Yitzi N

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La tarde en Culiacán cayó con la familiar sensación de rutina, interrumpida solo por el zumbido constante del tráfico en el malecón Nuevo. La vida seguía su curso, ajena a la tragedia que había ocurrido apenas unas horas antes, en un punto casi invisible para la mayoría

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Leonora Lagarda el 07/02/2025 08:20 AM.
En México y editada el 07/02/2025 08:25 AM.

Pero detrás de la aparente calma, se ocultaba una historia con nombre propio: Jairo Yitzi N. Su nombre, hasta ese momento desconocido para el público, se convirtió en el centro de una investigación que comenzó con el macabro hallazgo de un cuerpo sin vida, encobijado y emplayado a espaldas de la Torre Académica de la UAS, en una calle que conecta el bulevar Francisco Labastida Ochoa con la avenida Las Américas, en la colonia Chapultepec.

El descubrimiento, hecho en la mañana del miércoles, dejó a las autoridades con un caso más en su ya larga lista. El cuerpo, en estado lamentable, fue trasladado al anfiteatro, registrado como NN, esperando una identificación que parecía lejana. El proceso, como suele ser habitual, involucró un meticuloso trabajo pericial.

Sin embargo, la esperanza de un cierre para la familia de Jairo llegó cuando sus seres queridos, con el corazón en un puño, acudieron al servicio médico forense. Ahí, entre la fría impersonalidad del lugar, reconocieron a su familiar. “Fue una agonía que terminó con una dolorosa certeza”, comentó una fuente cercana a la familia, quien pidió mantener el anonimato.

Tras la autopsia, y con la confirmación de la identidad, los restos de Jairo Yitzi N, vecino de la colonia Lázaro Cárdenas, fueron reclamados ante la agencia del Ministerio Público especializada en homicidios dolosos. Finalmente, su cuerpo fue entregado a sus familiares para darle cristiana sepultura.

La investigación continúa, buscando esclarecer las circunstancias que rodearon la muerte de Jairo, dejando en el aire la pregunta de qué motivó un acto tan cruel. La ciudad, una vez más, se sumerge en la sombra de la violencia, recordándonos la vulnerabilidad de la vida misma.