INE fija tope de $220,326 para campañas judiciales

El Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) ha aprobado, tras arduas deliberaciones, un tope de gastos de campaña de 220,326 pesos para todas las candidaturas al Poder Judicial. Esta cifra aplica indistintamente, desde ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación hasta jueces de distrito. La decisión, sin embargo, no estuvo exenta de polémica.
Inicialmente, la presidenta del INE, Guadalupe Taddei, propuso un aumento considerable en el tope, llegando incluso a los 1.4 millones de pesos para candidaturas a nivel nacional. Esta propuesta, sin embargo, no obtuvo el apoyo necesario para su aprobación. De igual manera, se descartó la posibilidad de escalonar los montos, estableciendo topes más bajos para candidaturas subnacionales.
La justificación del acuerdo se basa en la premisa de que las campañas se realizarán principalmente a través de "redes sociales y foros", y que la legislación secundaria establece la paridad con las aportaciones para diputaciones federales de la elección anterior. No obstante, esta justificación no convenció a todos los consejeros.
La consejera Carla Humphrey, presidenta de la Comisión de Fiscalización, emitió una seria advertencia: “establecer un tope restrictivo coloca a las candidaturas “en un umbral de ocultamiento innecesario y que les puede llevar a la ilicitud”. Su postura, junto a la de otros consejeros, abogaba por un tope que reflejara las diferentes realidades socioeconómicas de los aspirantes y la envergadura de las campañas a nivel nacional.
El consejero Uuc-kib Espadas argumentó que un tope elevado, incluso hasta 2 millones de pesos, generaría una desventaja significativa para candidatos sin grandes recursos, exacerbando la inequidad en la contienda. Similarmente, el consejero Jaime Rivera alertó sobre el posible abuso de recursos públicos por parte de candidatos que ya ocupan cargos públicos, utilizando su posición para obtener mayor visibilidad.
Por otro lado, la consejera Dania Ravel defendió el tope aprobado, argumentando que la preponderancia de las redes sociales minimiza la importancia del ámbito territorial en los gastos de campaña, haciendo el monto propuesto "adecuado". "No niego que es un tope limitado; no obstante...la manera de hacer campañas...me parece que lo justifica”, afirmó.
La discusión dejó en evidencia la complejidad de regular el financiamiento de campañas en un contexto donde la equidad y la transparencia son vitales. La decisión final, aunque justificada por el INE, deja abiertas interrogantes sobre la verdadera viabilidad de las campañas con un presupuesto tan limitado para algunos aspirantes.