Estigmas sociales complican rehabilitación de adicciones en mujeres

La violencia en todos sus tipos, la ansiedad y depresión pueden ser un detonante para que las personas caigan en el consumo de drogas, sin embargo, las mujeres que se encuentran en proceso de rehabilitación, además de cargar con la adicción cargan con todos los estigmas de ser mujer y con ello la probabilidad de que no cuenten con ayuda oportuna ante esta situación.

Las adicciones en las mujeres han presentado un incremento en el último año, sin embargo, muchas de estas féminas no reciben el apoyo de familia o seres queridos, por la pena de que la sociedad conozca la situación de adicción, tema que es distinto cuando se trata de un varón.

“Es muchísima la necesidad de atender la adicción en las mujeres en Nogales, ahorita estamos pasando por una situación alarmante porque son muchos los casos y no es que sea específicamente en mujeres, pero si está incrementando, lo que es la adicción en las mujeres está muy alta”, compartió Viviana Carreño directora de una clínica de rehabilitación femenil en Nogales.

Muchas de las mujeres que pasan por una adicción, suele ser a raíz de un cuadro depresivo que quieren evadir o por situaciones de violencia que han vivido, encuentran en las drogas un refugio de problemas que a la vez se convierte en la razón de perderlo todo.

“Vienen de la mano porque la mayoría de las chavas, muchachas o señoras que llegan a una institución de rehabilitación casi siempre vienen derivadas de algún tipo de depresión, algún trastorno, problemas psicológicos, entonces buscan a través del consumo una fuga o una salida para precisamente esos problemas que tienen”, comentó.

Las personas que se encuentran en un proceso de rehabilitación cargan todo el peso que esto conlleva, sin embargo, en el caso de las mujeres la carga es doble, ya que además de vivir este duro proceso de recuperar sus vidas, pueden ser señaladas por haber atravesado una situación como lo son las adicciones.

“El estigma de la mujer es algo mucho más fuerte de lo que la sociedad cree, yo lo viví y lo he vivido a través de muchas compañeras a lo largo de mi recuperación y quisiera llamarlo vergüenza, pero si existe ese estigma de que soy mujer, mamá, hermana, entonces qué pena que nadie se entere, que no haya fotos, porque todavía se batalla con esa cuestión, cuando en realidad una mujer no es diferente a un hombre, incluso yo puedo decir que la mujer batallas más, porque aparte de la adicción tan fuerte que cargan, cargan con el hecho de que son mujeres, que son violentadas”, expuso.