Florida, bajo el liderazgo del gobernador republicano Ron DeSantis, se perfila como el primer estado en eliminar los requisitos obligatorios de vacunación. La medida, impulsada por el cirujano general Joseph Ladapo, ha encendido las alarmas entre epidemiólogos y pediatras.
"Incluso si la cobertura de la vacuna se mantiene igual, el sarampión corre el riesgo de resurgir. Las pequeñas disminuciones que se podrían esperar debido a la eliminación de la obligatoriedad harían que eso ocurriera mucho más rápido", advierte Nathan Lo, profesor de la Escuela de Medicina de Stanford.
Los números no mienten:
- La tasa actual de vacunación en Florida (88.5%) ya está por debajo del umbral seguro del 95%
- Un estudio proyecta hasta 850,000 casos de sarampión en el estado si la cobertura cae un 10%
- El análisis muestra que en guarderías floridanas, la probabilidad de transmisión del sarampión alcanza el 85.5%
El peligro trasciende las fronteras estatales. Florida recibe anualmente:
- Más de 130 millones de visitantes
- Incluyendo 11.8 millones de turistas internacionales
- Convirtiéndose en potencial foco de dispersión nacional e internacional
Mientras el gobierno federal mantiene su postura oficial a favor de las vacunas, las declaraciones de figuras como Robert F. Kennedy Jr., secretario de Salud, han sembrado dudas en sectores de la población. Un terreno fértil para que decisiones como la de Florida encuentren eco en otros estados.
