NOGALES, Az
Las autoridades del Buró Federal de Investigaciones (FBI por sus siglas en inglés) confirmaron que la muerte del agente de la Patrulla Fronteriza Nicholas Ivie, y las lesiones con arma de fuego de otro oficial, fueron producto de “fuego amigo”, ya que las investigaciones preliminares señalan que podrían haberse disparado entre ellos mismos de manera accidental.
“A pesar de que es importante enfatizar que las investigaciones del FBI continúan, existen fuertes indicios de que la muerte del agente Nicholas J. Ivie y las heridas de un segundo oficial, fueron el resultado de un tiroteo accidental que involucró solo a los agentes federales”, fue lo que revelaron las autoridades del FBI la tarde del viernes.
Previamente, el sheriff interino del Condado de Cochise, Rod Rothrock, informó que no podía descartarse la posibilidad de que “fuego amigo” podría haber causado la muerte del agente federal y las heridas de bala del otro oficial, quien ya fue dado de alta.
Sin embargo, el FBI continuará con sus esfuerzos para resolver estos hechos fatales ocurridos la madrugada del martes, a unas cinco millas de la frontera, cerca del poblado de Naco, Arizona.
Sean Chapman, abogado que representa al oficial lesionado, destacó que la zona donde ocurrieron los hechos es sumamente peligrosa, y señaló que los agentes se encontraban persiguiendo traficantes que posiblemente se encontraban armados.
En cuanto a la posibilidad de que se hayan disparado entre ellos, el abogado mencionó no creer que ninguno de los involucrados en la investigación piense que alguno de los oficiales haya cometido el crimen. Además, dijo que esa teoría podría venirse abajo al revelarse las pruebas forenses, las cuales realmente apuntan a comprobar dicha teoría confirmada por las autoridades federales la tarde del viernes.