Guarda silencio agente fronterizo ante juez
Lonnie Ray Swartz, el agente de la Patrulla Fronteriza (CBP) acusado de disparar y matar a un adolescente mexicano, se negó a contestar las preguntas del juez durante una audiencia preliminar que se realizó el pasado martes en la Corte Federal de Tucson, como parte del juicio que se adelanta en su contra
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El diario de Sonora
el 25/08/2016 12:00 AM, Sección Arizona
Última edición 23/04/2024 06:24 PM.
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el 25/08/2016 12:00 AM, Sección Arizona
Última edición 23/04/2024 06:24 PM.
TUCSON, AZ.
Lonnie Ray Swartz, el agente de la Patrulla Fronteriza (CBP) acusado de disparar y matar a un adolescente mexicano, se negó a contestar las preguntas del juez durante una audiencia preliminar que se realizó el pasado martes en la Corte Federal de Tucson, como parte del juicio que se adelanta en su contra.
Documentos judiciales dan cuenta de que José Antonio Elena Rodríguez, un joven nogalense de 16 años, caminaba por la calle Internacional de esta frontera cuando recibió diez impactos de bala en la espalda, disparados por el agente Swartz a través de la valla fronteriza en Nogales, Arizona, en hechos ocurridos el 10 de octubre de 2012.
Los documentos también proporcionan detalles del incidente ocurrido la noche de la muerte de Elena Rodríguez. Entre otros, que el agente dijo que vomitó después de disparar y que dijo a sus compañeros que ‘le había dado a alguien’ en el otro lado.
A la audiencia asistió la madre de Elena Rodríguez, junto con sus tres hijos, después de obtener un permiso especial para entrar a Estados Unidos por unas horas. También estuvo presente la abuela del menor asesinado, Taide Elena.
Swartz se presentó ante el juez acompañado de sus dos abogados.
En el tribunal, el magistrado Raner Collins escuchó el testimonio de un representante de la agencia migratoria que explicó las políticas de la agencia en casos de tiroteos y uso de fuerza excesiva.
El agente fue cuestionado por el fiscal sobre ocho preguntas que se le hicieron después del tiroteo y Swartz se negó a contestar.
El juez Collins había programado la audiencia para determinar si incluiría las declaraciones del agente en el juicio.
La familia de la víctima espera que el juez tome una decisión favorable para ellos en el caso.
Este es el primer caso en el país en el que un agente de la Patrulla Fronteriza enfrenta cargos por un crimen trans-fronterizo.
El juez Collin aplazó el juicio para el 21 de febrero del 2017.
Lonnie Ray Swartz, el agente de la Patrulla Fronteriza (CBP) acusado de disparar y matar a un adolescente mexicano, se negó a contestar las preguntas del juez durante una audiencia preliminar que se realizó el pasado martes en la Corte Federal de Tucson, como parte del juicio que se adelanta en su contra.
Documentos judiciales dan cuenta de que José Antonio Elena Rodríguez, un joven nogalense de 16 años, caminaba por la calle Internacional de esta frontera cuando recibió diez impactos de bala en la espalda, disparados por el agente Swartz a través de la valla fronteriza en Nogales, Arizona, en hechos ocurridos el 10 de octubre de 2012.
Los documentos también proporcionan detalles del incidente ocurrido la noche de la muerte de Elena Rodríguez. Entre otros, que el agente dijo que vomitó después de disparar y que dijo a sus compañeros que ‘le había dado a alguien’ en el otro lado.
A la audiencia asistió la madre de Elena Rodríguez, junto con sus tres hijos, después de obtener un permiso especial para entrar a Estados Unidos por unas horas. También estuvo presente la abuela del menor asesinado, Taide Elena.
Swartz se presentó ante el juez acompañado de sus dos abogados.
En el tribunal, el magistrado Raner Collins escuchó el testimonio de un representante de la agencia migratoria que explicó las políticas de la agencia en casos de tiroteos y uso de fuerza excesiva.
El agente fue cuestionado por el fiscal sobre ocho preguntas que se le hicieron después del tiroteo y Swartz se negó a contestar.
El juez Collins había programado la audiencia para determinar si incluiría las declaraciones del agente en el juicio.
La familia de la víctima espera que el juez tome una decisión favorable para ellos en el caso.
Este es el primer caso en el país en el que un agente de la Patrulla Fronteriza enfrenta cargos por un crimen trans-fronterizo.
El juez Collin aplazó el juicio para el 21 de febrero del 2017.
